Comunidad de Madrid

La Justicia tumba los despidos de Fraile

Un juez condena al alcalde de Parla a readmitir a una de las empleadas que echó en octubre y declara nulos los 66 despidos. Obliga a pagar los sueldos de estos tres meses y finiquitos de 20 días por año, ya que les despidió sin indemnización

La Justicia tumba los despidos de Fraile
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MADRID- El pasado mes de octubre, el Ayuntamiento de Parla despedía a 66 trabajadores municipales. La medida provocó que la coalición de Gobierno, integrada por ediles socialistas y cuatro concejales de Izquierda Unida, saltaba por los aires y dejaba al alcalde, José María Fraile, en minoría. El 20 de noviembre, los grupos de la oposición, PP, IU y UPyD, aprobaban una moción que rechazaba los despidos, en la que instaban a Fraile a readmitir a estos empleados. Ahora, la Justicia ha determinado que los despidos realizados por el equipo municipal son nulos. Así lo pone de manifiesto la sentencia del Juzgado de lo Social número 33 de Madrid a la que ha tenido acceso LA RAZÓN y que resuelve el recurso planteado por una de las 66 personas que fueron despedidas.

El fallo subraya la nulidad del despido «por no seguirse el procedimiento de regulación de empleo previsto» en la Ley para casos como el del Consistorio parleño. La sentencia se fundamenta en que la extinción de los 66 contratos de trabajo «sólo pudo materializarse incoando el preceptivo ERE, tal como se dispone en el artículo 51 del Estatuto de los Trabajadores». En contra de ello, el equipo de Fraile decidió en octubre realizar los despidos de forma individualizada. La decisión de aprobar un Expediente de Regulación de Empleo hubiera necesitado de la autorización de la Comunidad de Madrid, que, a su vez, tendría que haber controlado que el proceso se realizara con todas las garantías.

Además, el fallo recuerda que este artículo del Estatuto de los Trabajadores deja claro que estos despidos, en el caso de haberse realizado por el procedimiento previsto, han de contemplar una indemnización de 20 días por año trabajado. Algo que tampoco se cumplió en el caso de Parla, ya que no recibieron ningún tipo de compensación económica. En este sentido, el magistrado asegura en su escrito que «lo que no es admisible en ningún caso» es validar la extinción del contrato «no por llegado su término natural, sino por causas ajenas a ella y al contrato y sin recibir el resarcimiento previsto para estos casos». De esta forma, el juez pone en entredicho el procedimiento puesto en marcha por el Gobierno del PSM a la hora de reducir la plantilla municipal.

Como consecuencia de la nulidad del despido, la sentencia condena al Ayuntamiento de Parla a que en el plazo de cinco días sea readmitida la persona que interpuso el recurso. Además, le deberán ser abonados los salarios que ha dejado de percibir desde la fecha en la que se efectuó su salida.

Aunque la sentencia resuelve el recurso planteado por una de las trabajadoras, la argumentación jurídica sobre la que el magistrado sustenta su fallo hace referencia en todo momento a que los 66 despidos en su conjunto se efectuaron de forma contraria al Estatuto de los Trabajadores.

En su día, José María Fraile calificó los despidos como una decisión «inevitable» motivada por la situación económica del Ayuntamiento y no tuvo reparos en calificarla «como un ejercicio de responsabilidad». Ahora, a Fraile sólo le queda la opción de recurrir la sentencia que declara nulos estos despidos. Una opción que, sin embargo, amenaza con alargar el conflicto y con terminar resultando todavía más costosa para las maltrechas arcas de la ciudad.

Una deuda, sin solucionar
Esta sentencia supone el último revés para un equipo municipal marcado por la polémica. En minoría desde que Izquierda Unida decidiera salir oficialmente de la coalición en el poder, Fraile se enfrenta a la gestión de un día a día lastrado por una deuda que, según el grupo popular, supera los 200 millones de euros. Como consecuencia de este agujero en las cuentas, el consistorio no paga puntualmente y de forma íntegra desde hace meses los servicios públicos municipales, así como las nóminas de sus empleados. La recogida de basuras, el servicio de limpieza, los polideportivos o el tranvía de Parla se han convertido en continuos campos de batalla por el contexto cercano a la quiebra del Ayuntamiento.


«Madrugón» sin derecho a voto
Para analizar la difícil situación que atraviesa Parla, el Partido Popular convocó un Pleno extraordinario que finalmente se celebrará hoy. De acuerdo con el Reglamento municipal, el grupo de la oposición que propone este Pleno puede fijar el orden del día, mientras que el alcalde, por su parte, determina la fecha y la hora del mismo. Sin embargo, José María Fraile, al margen de convocarlo a una hora tan poco habitual para estas citas como las 8:30 de la mañana, ha modificado la propuesta inicial de los populares. De hecho, ha suprimido del orden del día el punto en el que el PP pedía los informes de la interventora municipal. Del resto de puntos, el alcalde también ha vetado la posibilidad de someter a votación las propuestas del PP. Sólo autoriza su debate, pero, quizá porque se sabe en minoría, los concejales no podrán aprobarlas o rechazarlas. Entre los puntos que no se votarán está la iniciativa del PP de dar máxima prioridad a los pagos de la limpieza y los comedores de los colegios.


ENCIERRO POR EL IMPAGO DE LAS NÓMINAS
Los trabajadores municipales iniciaron ayer un encierro «permanente» en el Ayuntamiento parleño. Lo que reclaman los miembros del comité de empresa es que el Ejecutivo de Fraile les abone la totalidad de las nóminas del mes de enero, ya que hasta el momento sólo han percibido el 40% de las mismas. Fuentes sindicales señalaban que su acción va para largo y que su intención era pasar allí la noche para poder acudir al Pleno de hoy. Respecto a los pagos pendientes, los trabajadores municipales son pesimistas: «Nos dicen que no tienen liquidez y que no pueden pagar». Aunque desde el municipio se escudan en los impagos de la Comunidad, desde el comité de empresa aseguran que la mayoría de los empleados dependen del presupuesto municipal: «Es increíble que en octubre se despidiera a 66 personas y ahora nos encontremos con esto».