España

Pasteur y las defensas

La Razón
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Cuando empieza la campaña de vacunación en España, ese método efectivo para prevenir la infección y las complicaciones de la gripe, surge, para gloria de Louis Pasteur, el Premio Nobel de Medicina de este año concedido a los investigadores, Beutler, Hoffmann y al fallecido Steinman, por sus hallazgos sobre el sistema inmunológico. Los premiados pretenden desbrozar el mecanismo molecular de las proteínas receptoras y las células dendríticas.

El profesor José Miguel Sempere, inmunólogo de la Universidad de Alicante, asegura que las células dendríticas pertenecen a la Inmunidad innata y son las células del sistema inmunológico que se pueden definir como «presentadoras de antígeno por excelencia». Su función fundamental es precisamente presentar el antígeno (extraño o propio) a las células de la inmunidad adaptativa (linfocitos T y B), y esa presentación ayuda a la activación de dicha inmunidad adaptativa, para que pueda llevar a cabo sus funciones efectoras.

Ya ven que la inmunología como en la vida social para que las cosas no sean tan agresivas en su inmediatez también se utilizan intermediarios. Habitualmente, dice Sempere, la célula presentadora de antígeno, como puede ser una célula dendrítica o un macrófago, reconoce en primer lugar al microorganismo que ha de ser eliminado.

Una vez reconocido el microorganismo, es procesado en el interior de esa célula presentadora, y posteriormente los fragmentos son expresados de nuevo en la membrana de dichas células, con el fin de presentar dichos fragmentos a las distintas células de la inmunidad adaptativa, que los reconocerán a través de sus receptores de membrana y que ayudarán a la eliminación definitiva de ese micoorganismo. Es lo que hay. Seguro.