Murcia

Desánimo

La Razón
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Ante las excesivas muestras de prepotencia incontrolada, la indefensión total del ciudadano ante el abuso de algunos poderosos y gobernantes, la incorrecta exaltación del machismo contra la integridad moral, el sorprendente comportamiento del Ministerio del Interior, la pasividad de los que imponen las leyes para todos menos para ellos, donde el castigo ejemplar sería la única lección justa que entendería la gente para creer a los que tienen un cargo oficial en el Senado, donde se supone que deben representar y proteger sin la inmunidad ante el atropello de la democracia por ciertos energúmenos fascistas que humillan y dilapidan los derechos del ser humano, auemta el desánimo, la falta de ilusión.
Esa epidemia de caciques, vergüenza de la civilización insultan, amenazan, aprovechando sus privilegios y lo más indignante es que no reciben la sanción correspondiente a su responsabilidad política. Y ante la ciudadanía el silencio. Se mantienen en sus cargos oficiales. ¿Esa es la vida política austera a la que debemos sumisión y credibilidad aunque desangre como vampiros y además se remunera su conducta brutal e incívica?
Mientras el pueblo soporta los recortes ecónómicos, algunos políticos tienen la ocurrencia de solicitar cuatro mil euros más para los directores de gabinete... ¿Fomentar el hecho cultural, despertar conciencias...?
La sociedad está perdida en el laberinto de la apatía. Si recibe a menudo la falta de respeto no saldrá nunca de la frustración depresiva. ¿Hasta cuándo van a permanecer inmunes los privilegiados? ¿Sólo con buenas intenciones se erradicará el desánimo?