«La tarea de evangelización incluye a las universidades católicas»

ÁVILA- «Se ha verificado una pérdida preocupante del sentido de lo sagrado y ahora la tarea de la evangelización incluye a las universidades católicas, que deben hacer ciencia en el horizonte de una racionalidad verdadera, hacer ciencia abierta a la verdad y a Dios», dijo ayer Zenon Grocholewski, cardenal y prefecto de la Congregación para la Educación de la Santa Sede (el equivalente a un ministro de universidades y colegios católicos) parafraseando al Papa Benedicto XVI. La reflexión la hizo durante la inauguración del Congreso Mundial de Universidades Católicas en Ávila, que reúne hasta mañana a más de 900 personas de 170 universidades de todo el mundo procedentes de 40 países de los cinco continentes. Además están presentes más de 200 instituciones que analizan durante estos días «la identidad y la misión de la universidad católica».
Grocholewski manifestó que «la misión que la Iglesia confía a las universidades católicas tiene un significado de vital importancia, pues concierne al futuro mismo de la humanidad». La clave está en «promover un saber orientado hacia la fe y la teología auténtica debe encontrar espacio en la universidad como ciencia que se interroga sobre la razón de la fe». Del mismo modo, «es importante que los jóvenes vivan la alegría de estar al servicio del otro y que los docentes anclen sus enseñanzas en la caridad intelectual porque llevar a los jóvenes a la verdad es un acto de amor que les abre a la gran aventura de lo que deben hacer».
Citando al Papa Benedicto XVI, dijo que «nuestras instituciones ofrecerán una contribución vital a la misión de la Iglesia y servirán eficazmente a la sociedad. Serán lugares en los que se reconocerá la presencia activa de Dios».
El acto inaugural del Congreso, «prólogo» de la Jornada Mundial de la Juventud, a la que se hicieron numerosas referencias, contó también con la presencia de la rectora de la Universidad católica Santa Teresa de Jesús de Ávila, María del Rosario Sáez Yuguero, que reflexionará hoy sobre la respuesta de la universidad católica a los grandes retos de la humanidad.

Cultura enraizada
Durante el acto inaugural hizo hincapié en la idea de que los centros del conocimiento y foros del saber, como son las universidades, «están llamadas a promover una cultura enraizada en el Evangelio y la investigación debe realizarse a la luz del mensaje cristiano». Y es que la formación que se debe ofrecer a los jóvenes debe incluir tanto «valores éticos» como la «misión de servicio» a la sociedad.
En la inauguración del congreso también participaron el obispo auxiliar de Madrid y secretario de la Conferencia Episcopal, Juan Antonio Martínez Camino; el obispo de Ávila, Jesús García Murillo; Lidia Jiménez, presidenta del consejo directivo de la Universidad de Ávila; además del director general de universidades de la Junta de Castilla y León, Ángel de los Ríos; y el alcalde de Ávila, Miguel Ángel García Nieto.

Un foro para «repensar»
El congreso cuenta hoy con una nutrida agenda de expertos. La jornada comienza con la intervención de Rino Fisichella, presidente del Consejo Pontificio para la Promoción de la Nueva Evangelización, que analizará cuál debe ser el papel de la universidad. También intervendrá el profesor de la Universidad de Navarra Alejandro Llanos Cifuentes, que presidirá una mesa de expertos cuyo cometido es «repensar» la universidad, y Consolación Isart, profesora de la Universidad católica de Valencia San Vicente Mártir, dirigirá otro grupo que analizará «el acompañamiento personal» en estas instituciones académicas. Las comunicaciones versarán sobre la contribución de la universidad católica al desarrollo de una antropología, la respuesta que está dando a los grandes retos de la humanidad y su proyección evangelizadora.