Plantó cara

El Granada llegó al Bernabéu a plantar cara. Lo hizo con buena disposición en el campo y contragolpes rápidos con Uche, Benítez y Rico, el bombardero de segunda línea, quien marcó de cabeza el gol con que empató. El Granada no se arrugó ante la potencialidad madridista y, aunque mostró precauciones defensivas, en ningún momento renunció al ataque. En uno de ellos, tras el gol de Benzema, que abrió la marcha goleadora, Uche mandó un balón con temple al área y Rico batió a Casillas.
Volvió a defender mal el Madrid un balón aéreo. Por el contrario, también acertó con el mismo método cuando Ramos batió a Roberto. Últimamente, en el Bernabéu se está reivindicando el remate de cabeza. Con todo, es preocupante para los madridistas que su equipo sea tan vulnerable en el juego aéreo. Mourinho volvió a confiar en los tres que resolvieron el partido contra el Málaga. Khedira, Özil y Benzema fueron titulares y se dio la circunstancia, tantas veces comentada, de que el francés jugara junto a Higuaín y no se constatara incompatibilidad entrambos.
Por si alguien podía pensar en la posibilidad de que los granadinos volvieran a empatar, el Madrid liquidó el partido en los cinco primeros minutos del segundo tiempo. Higuaín y Benzema dictaron sentencia. La defensa visitante dio facilidades.
En los años en que el sábado noche, sin televisión, la gente seguía «Cabalgata Fin de Semana» de Radio Madrid, que dirigía Boby Deglané, y el Granada aportaba un hecho diferencial al programa: el medio y tenor guipuzcoano Larrabeiti, que durante el verano cantaba zarzuela. Del Granada de ayer sólo quedará memoria amable, pese al susto que dio con el gol del empate.