La última amenaza de huelga en Urgencias

Tras las huelgas educativas, los recortes en Sanidad amenazan con poner en pie de guerra a los profesionales sanitarios en distintas autonomías. A finales de este mes, además, se les unirán los médicos de Urgencias de toda España. Entre tanta protesta por motivos salariales o de reorganización del trabajo, el paro de los facultativos de emergencias tiene un origen bien distinto: no están reconocidos como especialistas y, después de una década de lucha, están cansados de promesas. Por ello pararán uno o dos días en la semana del 24 de octubre. Los servicios de Urgencias de hospitales, salvo el mínimo imprescindible, se vaciarán de facultativos, y las emergencias como el Summa o el Samur también estarán llamadas a la protesta.

Así lo confirmó ayer a LA RAZÓN Tomás Toranzo, el presidente de la Sociedad Española de Medicina de Urgencias y Emergencias (Semes). Toranzo quiso dejar claro que su huelga no es «política», y recordó que ya la habían anunciado «antes de la convocatoria anticipada de elecciones. A su juicio, el Ministerio de Sanidad, les ha «engañado», pues en 2010 prometió atender sus reivindicaciones «que no son económicas, sino profesionales». Así, redactó un real decreto, ahora en trámite de audiencia, en el que se crea la especialidad de urgencias, sí, pero de tal manera que hace falta estar en posesión de otra especialidad para cursarla. «Es un engaño», asegura Toranzo, quien explica que sólo con una especialidad propia impartida en hospitales (vía MIR) se garantizará la calidad de la asistencia.

«El ejemplo más claro es el de la médico del Samur que ha salvado a un bebé al hacerle una cesárea a su madre fallecida. Pudo hacerlo porque se ha formado de manera autodidacta, porque ahora no hay nada que garantice que los facultativos de emergencias saben hacer estos procedimientos», señala el presidente de Semes.

Un «recorte» evitable
Si la especialidad no se crea, Toranzo afirma que los pacientes «se encontrarán, cuando vayan a Urgencias, a médicos que estén allí de paso y, en ocasiones, en condiciones laborales precarias. En este sentido, pidió el apoyo de los ciudadanos: «Van a sufrir muchos recortes, forzados por la situación económica, pero éste no tienen por qué sufrirlo, porque no se trata de dinero».

Por su parte, el Ministerio de Sanidad aseguró ayer a este periódico que está «en condiciones» de aceptar las alegaciones que los «urgenciólogos» han presentado al polémico decreto. Si no lo ha hecho antes ha sido por las presiones de los médicos de familia, en particular de una de sus sociedades científicas, la Semfyc, muy vinculada al Gobierno del PSOE (varios altos cargos de Sanidad han pertenecido a esta entidad). De poco sirve la rectificación, de momento. Toranzo reiteró que mantendrán la huelga «hasta que se publique en el BOE la especialidad», porque «ya nos han mentido muchas veces».

Una década de protestas
MARZO DE 2000
Los médicos de Urgencias fueron a la huelga para reclamar una especialidad y estabilidad laboral.
MAYO DE 2005
Tras la llegada del PSOE al Gobierno, los trámites para crear la especialidad se paralizaron y los facultativos volvieron a salir a la calle.
JULIO DE 2010
Sanidad prometió iniciar el trámite para crear la especialidad y cesaron las protestas.