Valencia

Unas «Carmelitas» emocionantes

«Diálogos de carmelitas»De Poulanc. Intérpretes: I. Monar, K. Harries, J. Watson, I. Vermillion, M. C. Kiehr, A. Michaels-Moore, R. Padullés. Coro Catedralicia de Valencia. Dirección musical: M. Gómez- Martínez. Palau de la Música. Valencia, 26-II-2011.

Imagen de un momento del concierto
Imagen de un momento del conciertolarazon

Ha sido grande y expuesto el reto del Palau de la Música valenciano al programar una ópera poco frecuente y en concierto cuando en el edificio de al lado existe una temporada de ópera ya célebre internacionalmente. Por fortuna, el reto se ha resuelto muy positivamente, con casi diez minutos de ovaciones al final de las más de tres horas de concierto. Ese entusiasmo iba dedicado fundamentalmente a tres artistas: Miguel Ángel Gómez-Martínez, Iris Vermillion e Isabel Monar. El público, una vez más, sabía lo que hacía.

Lectura intensa y controlada

Las dos semanas de ensayos, que suponen un lujo para un solo concierto, han sido claves para lograr una versión musical que puede calificarse de magnífica. Gómez-Martínez fue su artífice, con una lectura intensa y a la vez controlada, quizá mucho más dramática de lo habitual en esta partitura, pero con esfuerzo manifiesto en cuidar las partes más líricas, aquellas del Poulenc más conocido, obligando a la orquesta a tocar unos pianos para los que se ha de estar preparado. Impresionantes por su teatralidad momentos como los finales de los cuadros segundo o tercero del acto segundo, pero también el equilibrio entre paz y violencia en el dúo entre Blanche y la Priora. Desde hace tiempo se viene observando en el granadino una mayor efusividad e implicación emocional en sus trabajos que aumenta su poder de comunicación.

El final impactante, con el desarrollo al clímax de coro y orquesta, el estruendo de la guillotina acompañado de un simple pero efectivo acompañamiento escénico de las monjas ejecutadas y la resolución final hasta enmudecer el sonido. Posiblemente la interpretación de Nino Sanzogno discurrió por planteamientos parecidos cuando la première scagliera de 1957.

Cantó bien la mezzo Iris Vermillion a la Madre Marie, lo mejor vocalmente de la tarde. Blanche representa un papel quizá excesivo para la lírica voz de Isabel Monar, pero lo defendió con mucha dignidad y entrega a falta de solucionar algunos problemas técnicos. Kathryn Harries quedó corta de voz que no intención, como Priora Croissy. Casi en el extremo opuesto estuvo Janice Watson en una nueva Priora bastante destemplada. Muy discreto el resto del reparto femenino y ampliamente mejorable el masculino. Una excelente versión musical que no pudo estar acompañada al mismo nivel vocal.