Elecciones autonómicas

La doble moral socialista

La Razón
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La cacería ha terminado. La manipulación que se ha vivido contra el ex presidente valenciano se ha cobrado su pieza, aunque se trata de un político honorable. Al PSOE no le importa. La izquierda es así. Por eso sigue la máxima del editor estadounidense Hearst, que «la verdad no impida una noticia». Camps renunció por el bien de su comunidad y su partido. Una decisión acertada, porque el PSOE le quería convertir en el chivo expiatorio contra Rajoy. Los valencianos conocen su honradez y lo demostraron otorgándole el 22-M una victoria contundente. Estas cosas no importan cuando se celebra una cacería política. No hay más que ver lo que hicieron los socialistas con Suárez y cómo ahora, que está enfermo, loan su memoria. Camps se enfrentará a un jurado por una cuestión irrelevante. Una excusa utilizada para acabar con su carrera política, porque era un estorbo. Esta doble moral del PSOE no les dará réditos en las generales y cabe reclamar que dimitan sus dirigentes, que están implicados en escándalos. El «caso Faisán» sería un buen inicio.