El sastrecillo valiente

No hace mucho tiempo, en España, la sociedad nadaba en la abundancia. Cual moscas, se dejaron atraer por la mermelada de tan rica tostada, confiadas y alegres se zamparon todo lo que se les ofrecía, sin pensar que el dueño no les permitiría revolotear eternamente sin pagar algún tipo de peaje.

«Siete de un golpe», el lema que el sastrecillo valiente acuñó para sí, es la prueba de cómo una verdad presentada maliciosamente convierte la realidad en la manera de alcanzar la meta que uno desee. El fin justifica los medios. Puro marketing estratégico. Durante demasiado tiempo logró engañar a muchos. Aún hoy, bastantes siguen cayendo en su mermelada (propaganda política). «Siete de un golpe». Incluso el rey le creyó, prometiéndole la mano de su hija si lograba cazar al unicornio. Al haber ganado dos comicios, se ciñó su orgullo y salió al mundo convencido de que su país era demasiado pequeño para sus talentos y ambiciones: «Somos los primeros de la Champions League, pasaremos a Francia…» ZP dixit.

Estaba convencido de que su capacidad para disfrazar la verdad y coserla a su antojo, cual sastrecillo valiente, le permitiría vencer a la realidad usando eslóganes publicitarios. Los datos son interpretables, pero principalmente mandan los resultados. Mira de lo que eres capaz «sanZPdelasruinas»: los gigantes se te están merendando, las moscas no te dejan en paz, y hasta el rey acabará por pedirte que le devuelvas al unicornio su libertad. Cinco millones de parados han caído como moscas, tú solito lo has logrado. ¡Valiente desastrecillo estás hecho!