París

Ferrer sucumbe ante Monfils y deja a Nadal como único español en cuartos

El tenista español David Ferrer se ha despedido de Roland Garros, segundo 'Grand Slam' del año, en octavos de final al caer en cinco mangas ante el local Gael Monfils en la reanudación de un partido que tuvo que aplazarse por falta de luz.

El de Jávea, campeón este curso en Auckland y Acapulco, no pudo frenar al parisino y se despidió por 6-4, 2-6, 7-5, 1-6 y 8-6, dejando a Rafa Nadal como único representante de la 'Armada' en los cuartos de final del Abierto francés.

La falta de luz obligó a la organización a aplazar el partido con 6-4, 2-6, 7-5 y 0-2 en el marcador. El número siete del mundo reanudó el encuentro en el cuarto set con 2-0 a su favor y no tardó en adjudicarse la manga gracias a dos 'breaks' consecutivos que le permitieron ponerse con 5-0 y llevarse el parcial por la vía rápida.

Sin embargo, necesitó emplearse a fondo en el set definitivo después de permitir a Monfils, que en todo momento arengó al estilo de la Copa Davis a su afición, que se pusiera en ventaja con una rotura en el cuarto juego (3-1).

A pesar de ir a remolque en todo el set, 'Ferru' ofreció su mejor versión en el noveno juego. Tras una 'caña', Monfils gozó de sus dos primeros 'match points', pero el alicantino los salvó, el segundo con un increíble 'drive' a la línea tras un intenso peloteo.

De todos modos, Ferrer no pudo culminar la remontada y aunque salvó otro bola de partido, permitió al galo ponerse con 0-40 en el decimocuarto juego y ahí Monfils ya no dudó y selló el pase a la siguiente ronda, donde se medirá con el exnúmero uno del mundo Roger Federer.

Al término del encuentro, el pupilo de Javier Piles lamentó haber fallado "tres derechas seguidas"en los últimos compases del partido. "Eso me hizo mucho daño. No se puede fallar tal y como estaba el partido", aseguró en declaraciones a RTVE que recoge Europa Press, al tiempo que deseó suerte a Rafa Nadal a quien sigue considerando "el favorito".