Grecia

La insolvencia es de Grecia por Miguel Ángel Rodríguez

La Razón
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Desde hace tiempo se tiene asumido que Grecia no podrá pagar su deuda y que la mejor salida es la de aceptar una quita. Pero entre la banca alemana y francesa suman una exposición de 90.000 millones de euros a estos activos, por lo que un impago de un 60% supondría que estos bancos asumieran una pérdida de alrededor de 54.000 millones de euros. La banca española no tiene riesgo griego significativo. ¿Cómo encajar esta situación? Recapitalizando a quien lo necesite.
La Comisión Europea, a instancias de Alemania, pide que para la tasación de estas necesidades se valoren las carteras de deuda a vencimiento de los bancos europeos. Pero estas carteras no se valoran a precio de mercado porque se mantienen hasta vencimiento. Una vez obtenido este dato piden que se calculen las necesidades con un criterio de capital básico de un 9%.
Para la valoración de estas carteras de deuda soberana se ha propuesto que a la deuda española e italiana se le aplique un precio hipotético de máximo estrés, con una devaluación que oscila entre un 5% y un 20%. Estos criterios tan duros sólo beneficiarían a los bancos alemanes y en menos cuantía a los franceses que verían compensadas, en parte, las pérdidas en bonos griegos con el incremento de precio de sus propios bonos.
Los bancos españoles, sin tener exposición al activo problemático se verían obligados a buscar capital porque su cartera de deuda española de alrededor de 231.000 millones de euros se devaluaría siguiendo unos criterios alarmistas. La banca española no tiene necesidad de capital. Su situación financiera es mucho mejor que la de sus competidores franceses y alemanes. Esperemos que no prosperen esos criterios de parcialidad y que cada país reconozca sus verdaderas necesidades sin dejarse llevar por tentaciones electoralistas de corto plazo.

Miguel Ángel Rodríguez
Analista asociado de XTB