Podrido por Manuel Muñoz Hidalgo

Como dice Shakespeare en Hamlet : Algo huele podrido en Dinamarca, nos hace reflexionar cuando los problemas aumentan y el horizonte es un laberinto para los más indefensos que provoca el descontento social y un enriquecimiento para los más privilegiados cuyo fanatismo les hace insoportables.
El rescabrajamiento de las instituciones oficiales,el perdonar a los delincuentes financieros, el aprobar una reforma laboral que genera más paro, la amputación del futuro de los más jóvenes y de los que no lo son, la incompetencia y debilidad de políticos, la indecencia de que en un estado democrático no se tenga esperanza de un empleo, una economía donde no hay liquidez ni genera trabajo, donde se abandona a la gente, se admite el soborno, donde ningún partido miente pero ninguno da soluciones, donde la ley del embudo es norma,donde el fanatismo avasalla, donde no sabemos qué nos van a pedir a cambio los que ayuden al rescate, donde falta diálogo, información, cuando no se asume la responsabilidad y se señala a los demás para desviar la atención, donde se han perdido las formas, ningunean la cultura y favorecen la ignorancia, cuando el pueblo se pregunta si estamos mejor o peor, cuando la prensa internacional ironiza con los eufemismos del Gobierno, cuando no se atiende al ciudadano y se medra, donde la crisis económica no es la única causa de escándalos y corrupción... si no dan razones por las que nos intimidan dejando atrás lo que habíamos conseguido...¡ Mucho huele a podrido!