La vida en un Post-It

Tercera fase
Hace unos años, un extraterrestre dejó embarazada a una mujer de Molina de Segura. Era verano y, según ella, el alienígena dejó el ovni aparcado en el tejado y se coló por la ventana de su habitación. Tras esa noche de pasión, dejó de bajarle la regla. Lo contó con detalle una mañana, en un magazine de Antena 3. Luego, con el paso de los meses y ante la evidencia de que no estaba en estado, se retractó: lo achacó todo a un sueño muy real y a la menopausia. De cualquier forma, la experiencia de salir a la tele le había encantado. Así que, para encuentros en la tercera fase, los de mi pueblo y no los de Spielberg.


Dedicatorias
La otra mañana, un señor se acercó al mostrador de mi mercería solicitando una dedicatoria para su ejemplar de El último barco a Amércia. «En cuanto llegue a casa -me dijo-, lo coloco junto al retrete; y así, cada día, lo leeré durante un ratito». Quedé de piedra al escucharlo. ¡Dios mío! Nunca sabe uno que está haciendo un lector cuando te tiene entre sus manos.