Los asiduos a la «Ruta del bacalao» son ahora más permisivos con sus hijos

Valencia- Valencia fue en la década de los ochenta lugar de peregrinaje de todo «clubber» que se preciara. Barraca, Spook Factory, Chocolate, Puzzle y ACTV se llenaban cada fin de semana con miles de jóvenes ávidos de sonidos no convencionales. La «Ruta del Bacalao» marcó un antes y un después en la manera de entender el ocio nocturno de los valencianos.
Han pasado ya más de veinte años desde que Chimo Bayo llenara las pistas y aparcamientos de las discotecas de la carretera de El Saler, pero aquella época dejó marca en los hijos del movimiento «Destroy».
Los resultados preliminares de un estudio de investigación llevado a cabo por la Fundación para el Estudio, Prevención y Asistencia a las Drogodependencias (Fepad) reflejan que los padres que en su día fueron asiduos a la «Ruta» se muestran más permisivos en determinados aspectos con sus hijos. De hecho, les cuesta menos hablar del consumo de estupefacientes con su prole. «Lo hacen con mayor naturalidad y de forma más abierta». Además, en ocasiones muchos de ellos conocen el consumo de sus vástagos y lo aceptan. Por su parte, sus hijos presentan mayor consumo de determinadas sustancias, como anfetaminas, alucinógenos, hipnosedantes y sustancias volátiles. Sin embargo, los padres no consumidores durante aquella época son menos tolerantes y recurren a la prohibición y castigo ante la existencia de un consumo de drogas.
 «La Sombra de la Ruta» pone en evidencia que uno de los elementos propios del ocio actual frente a los que estaban implantados durante aquella época es el referido al tipo de relaciones sociales que se mantienen entre los usuarios de un ocio determinado.
Y es que actualmente se observa un incremento de la agresividad y la violencia relacionado con el consumo de sustancias ilegales entre la población juvenil, mientras que entre los «bakalas» de entonces, el uso de drogas estaba relacionado con el «concepto de hermandad «y la necesidad de establecer relaciones sociales. Hoy influye el individualismo y competitividad propio.
Asimismo, destaca la aparición de nuevas sustancias con potencial adictivo y nuevos patrones de consumo relacionados con las nuevas circunstancias sociales y necesidades actuales de los jóvenes, por ejemplo, la utilización de esteroides anabolizantes debido al culto al cuerpo y la estética.

Veinte años del «Así me gusta a mí» de Chimo Bayo
El «Dj» valenciano Chimo Bayo eligió días atrás la sala Spook para celebrar los veinte años de su mayor éxito, el tema «Así me gusta a mí», icono de la «Ruta del bacalao». En la imagen, una veintena de «Djs» pincharon la semana pasada en el Metro de Valencia para celebrar el Día de la Música y reivindicar la «dignidad» de una profesión que, según Bayo, hace dos décadas tenía una imagen más transgresora. «Hoy se ha normalizado».