Andalucía: Arenas coge el aire justo para jugársela en 2012

Si no hay adelanto electoral, 2012 será la fecha clave para el líder de los populares andaluces, Javier Arenas. Se presentará por cuarta vez a la Presidencia de la Junta. Ya no habrá más intentonas. Arenas se la juega definitivamente en la comunidad. Por eso tiene el partido en permanente ebullición interna, buscando las formas de conquistar los difíciles municipios del interior y proyectando una imagen clavada en el centro político.

Las europeas dan al PP un oxigenante resultado. Un paso más en el recorte de distancias con los socialistas. Hace cinco años acabaron con 18 puntos de diferencia y ahora están sólo a ocho: el 47,9 por ciento del PSOE, frente al 39,8 por ciento del PP. Se confirma un avance de los populares que el secretario general en Andalucía, Antonio Sanz, calificó de «imparable» en la noche electoral. Ahora bien, ¿es un resultado suficiente y esperanzador para propiciar un vuelco electoral histórico dentro de tres años? Ésta es la principal pregunta que queda en el aire. Es cierto que Arenas coge impulso, suma energía a su proyecto e inyecta esperanza a las bases, pero no hay que olvidar que el acorazado socialista sigue gozando de una vigorosa fuerza. Andalucía es un fiel granero de votos. El PSOE se ha impuesto en más de 600 municipios, mientras que los populares lo han hecho en poco más de un centenar. Un treinta por ciento del electorado que normalmente vota en los comicios autonómicos se ha quedado en su casa. Este porcentaje, junto a los factores clave de la crisis (el paro ronda ya el 24%) y el agotamiento de 30 años de proyecto socialista serán claves dentro de tres años.