Quito

Correa seguirá el rumbo de la estela bolivariana

Rafael Correa saluda a partidarios en Pujili, al sur de Quito, seguro de lograr la reelección
Rafael Correa saluda a partidarios en Pujili, al sur de Quito, seguro de lograr la reelecciónlarazon

BUENOS AIRES- Típico proceso bolivariano. Presidente populista llega al poder tras años de Gobiernos corruptos, reforma la Constitución para poder salir reelecto y convoca elecciones. En Ecuador la historia se repite y, este domingo, Rafael Correa tendrá todas las papeletas para seguir dirigiendo los designios de su país.«¡Esta revolución ciudadana está en marcha y nada ni nadie la detiene!», expresó casi sin voz el mandatario, de 46 años, en el acto de cierre de campaña celebrado en Guayaquil.Según una encuesta de Investigación Santiago Pérez a la que ha tenido acceso LA RAZÓN, Correa se impondría con el 50% de los votos, frente al 16% de su competidor más cercano, el ex presidente Lucio Gutiérrez (2003-2005), del partido Sociedad Patriótica. Estos datos indican que no habría segunda vuelta, puesto que la ley ecuatoriana dice que si un candidato obtiene el 40% de los votos y una distancia de al menos diez puntos porcentuales sobre el segundo, entonces puede declararse vencedor.Además, al tratarse de elecciones generales también se eligen asambleístas, es decir que Correa podría controlar también el Congreso. En los primeros comicios el mandatario rehusó presentarse como fuerza política sin candidatos ante la Cámara. Por otro lado, se trata de una campaña atípica, de la que estuvieron ausentes los debates entre los aspirantes presidenciales o las grandes manifestaciones. Se trata entonces de una victoria silenciosa de Correa, que tiene todo bien cerrado.La oposición, que llamó a esta contienda la más desigual de todas, denunció el uso desmedido de recursos estatales por parte del mandatario.«Tenemos sospechas sobre la transparencia de este proceso. En el aparato electoral sólo hay gente del Gobierno, por eso le estamos diciendo a los organismos [de observación electoral] extranjeros que nos ayuden a controlar», dijo Gutiérrez en su acto de Quito.España, en campañaRafael Correa no dudó en utilizar dos factores claves en la economía y el voto de Ecuador: la emigración y el petróleo.Hace dos días el presidente acusaba a España de mostrar «viveza ibérica» con la nueva ley de inmigración que, según Correa, niega la nacionalidad inmediata a los hijos de ecuatorianos. Sólo en «la madre patria» hay medio millón de ecuatorianos, la mayoría afincados en Madrid, y el voto exterior podría resultar clave de cara a una segunda vuelta.Además, el presidente ecuatoriano amenazó durante su campaña electoral con romper los contratos con aquellas compañías extranjeras que no acepten los criterios establecidos en los nuevos convenios. Precisamente, la compañía hispanoargentina Repsol-YPF concretó el pasado mes de marzo un principio de acuerdo con el Gobierno de Ecuador, en el que se contempla un compromiso de inversiones hasta 2018 estimado en 134,3 millones de euros, después de que a finales de 2008 el presidente Correa ordenase la cancelación del contrato.Concluyendo y salvo un giro de última hora, Correa –acusado por sus adversarios de despilfarrar el dinero del petróleo, ahuyentar la inversión extranjera y hasta de proteger a la guerrilla colombiana- se convertirá en el primer presidente reelecto en Ecuador en las últimas tres décadas.