De milagro

Desde el 3 de noviembre el Madrid no perdía. Fue en Sevilla: «¡Vivan los andaluces!». El Almería le ha vuelto a dar emoción a esta Liga cuando parecía sen- tenciada. Ésta es la gracia del fútbol.

El Barça, que venía animado tras clasificarse para semifinales de la Copa del Rey, dependía de sí mismo. Jugó regular, pero cumplió «in extremis», yo diría de milagro. En el minuto 43 de la segunda parte, Xavi salvó los muebles de un partido que olía a empate. De todas maneras a este equipo le falta gol y, hasta hoy, suerte.

Ronaldinho, el jugador de banquillo más caro del mundo, salió en la segunda mitad y no hizo nada. Este asunto también nos lo tenemos que hacer mirar. Ayer los mejores fueron los dos porteros, Ricardo y Valdés, ambos providenciales junto a Xavi. El Barça es un equipo de álbum de cromos al que le cuesta mucho marcar un tanto y así no se gana nada de nada.