El dispositivo de la noche de San Juan garantizará la seguridad

Los monumentos que durante estos días ahn engalanado las calles de Alicante, serán esta noche pasto de las llamas, como manda la tradición. Primero se quemarán los monumentos especiales de Calvo Sotelo, Hernán Cortés, Gran Vía-Cerámica, Séneca-Autobusos y Mercado Central y la Hoguera Oficial. Una hora después será el turno de las hogueras de San Blas y Carolinas Altas, que darán paso a la quema del monumento ganador de la sección especial de este año, Florida-Portazgo, al que prendieron fuego hacia la una y media de la madrugada.Estas celebraciones contarán con la presencia de un total de 530 efectivos de seguridad, entre Bomberos, Policía Local y Protección Civil, que vigilará la extinción de las hogueras y los portales de barracas levantadas en Alicante.El operativo dispuesto por el Servicio de Prevención y Extinción de Incendios y Salvamento (SPEIS) se ha diseñado como si se tratara de una mancha de aceite, es decir, dos grupos simultáneos de bomberos actuarán desde el centro a los barrios y de los barrios al centro, respectivamente.Por otra parte, para evitar las aglomeraciones, el TRAM-Alicante, junto con los autobuses urbanos e interurbanos, estarán toda la noche en funcionamiento para facilitar que las personas que se desplacen por la ciudad no emplearan sus vehículos.En el caso de Valencia, algo más de sesenta voluntarios de Cruz Roja, dos hospitales de campaña y cuatro dispositivos de Bomberos asistieron y velaron por la seguridad en las playas de esta ciudad con el motivo de la celebración de la noche de San Juan.El servicio, disponible desde las nueve de la noche hasta las cinco de la madrugada por la Cruz Roja consistió en la movilización de 61 voluntarios, entre ellos 40 socorristas, nueve conductores, ocho enfermeros, un médico, un responsable y dos coordinadores.