El Gobierno británico incluye a las redes sociales en su plan para controlar las conversaciones en Internet

La Home Office británica incluirá a la redes sociales en su plande seguimiento de los intercambios de información, que, de momento,sólo se aplican en el ámbito de los correos electrónicos, llamadastelefónicas, SMS y visitas a sitios web realizadas dentro de las fronteras del país. Según explicó un portavoz de la oficina, está previsto que la medida se ponga en marcha en las próximas semanas, cubriendo cualquier plataforma social que permita establecer conversaciones entre sus usuarios, como es el caso de Facebook, MySpace, Bebo y Twitter así como el servicio de llamadas 'on-line' Skype. De esta forma, el Gobierno podrá pedir a los responsables de estas redes sociales que guarden los datos de todas aquellas personas con las que hablen sus usuarios en un año, informa The Guardian. "No contamos con la manera de saber si Bin Laden está chateando con Abu Hamza en Facebook", se justicó el portavoz. La misma fuente asegura que el Gobierno no está interesado en los contenidos de las conversaciones, sino que desea monitorizar "el quién, el cuándo y dónde". No obstante, esta premisa se rompería si se trata de "perfiles altos", en los que la policía puede examinar el contenido en busca de información comprometida que suponga alguna falta o delito. Hace una semana, el ministro de la Home Office --departamento homólogo al Ministerio del Interior español--, Vernon Coaker, anunció el proyecto de transposición de la directiva europea sobre Retención de Datos de 2005, que, no cubre la situación de las redes sociales. "El Ejecutivo está viendo lo que podemos hacer porque hay cierto aspectos de las comunicaciones que no están incluidos en la directiva de la Unión Europea", afirmó Caoker a la vez que reconoció que la medida levantaría un debate sobre el derecho a la privacidad. En este sentido, el director del grupo pro derechos humanos Liberty considera que el desarrollo tecnológico "está siendo usado por el Gobierno como una excusa para fisgonear, algo inaceptable en la democracia más antigua del mundo".