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Nueva Delhi

El partido de Sonia Gandhi se impone en las elecciones indias

El partido de Sonia Gandhi se impone con solvencia en las elecciones indias
El partido de Sonia Gandhi se impone con solvencia en las elecciones indiaslarazon

El Congreso Nacional Indio (CNI) o Partido del Congreso ha logrado una aplastante victoria en las elecciones generales de la democracia más poblada del mundo. La victoria del partido del primer ministro Manmohan Singh se debe en gran parte a la popularidad de Rahul Gandhi, hijo y nieto de primeros ministros, que ha propiciado un aumento del apoyo al CNI en el norte del país.

El propio Singh anunció hoy en rueda de prensa que intentará convencer a Rahul para que se incorpore al gobierno que se formará tras la aplastante victoria del CNI en las elecciones legislativas cuyos primeros resultados comenzaron a conocerse hoy. "Deseo que esté en el gobierno, pero tendré que convencerle", afirmó Singh en rueda de prensa.

El CNI superó ampliamente al principal partido opositor, el Bharatiya Janata (BJP), nacionalista hindú, con lo que probablemente formará un nuevo gobierno de coalición de centro-izquierda más estable. "Finalmente los indios saben lo que es bueno para ellos y siempre eligen lo correcto", afirmó la presidenta del CNI, Sonia Gandhi, desde su casa de Nueva Delhi.

Sonia también defendió la entrada de su hijo Rahul en el nuevo gabinete, aunque dejó claro que el primer ministro seguirá siendo Manmohan Singh. Rahul es hijo de Sonia y Rajiv Gandhi, primer ministro entre 1984 y 1989, cuando fue asesinado. A su vez, Rajiv era hijo de Indira Gandhi, primera ministra entre 1966 y 1977, quien también murió asesinada.

El CNI lograría 261 escaños, 11 por debajo de la mayoría absoluta, según las proyecciones de la televisión pública. Según estas fuentes, el Bharatiya Janata conseguiría 160 escaños y la coalición Tercer Frente, formada por comunistas y otros partidos menores, se haría con 58 asientos.

FRACASO DE LOS COMUNISTAS

El Partido Comunista de India (PCI) ha sido el gran perdedor de los comicios, con reveses importantes en regiones anteriormente consideradas bastiones de la izquierda como Bengala Occidental o Kerala.

En total, el PCI podría perder la mitad de los 60 escaños que controla desde las elecciones de 2004, un hecho considerado sorpresivo por los analistas, que tampoco esperaban un triunfo tan claro del CNI. "El pueblo de la India ha hablado, y lo ha hecho con gran claridad", afirmó Singh. Mientras, en las calles, los seguidores del CNI celebraron la victoria electoral con fotografías de Rahul y de su hermana Priyanka Gandhi. "Estas elecciones muestran un rechazo tanto de la derecha como de la izquierda en favor de una ideología centrista que pueda andar por la cuerda floja entre el capitalismo y el socialismo", indicó un analista político, Paranjoy Guha Thakurta.

Desde hacía años el control del estado de Bengala Occidental y su presencia en el Parlamento convertía al PCI en partido bisagra imprescindible para cualquier gobierno de coalición, pero la ayuda gubernamental al asentamiento de nuevas industrias ha minado la base tradicional de votantes de los comunistas en favor del Congreso Trinamool de Toda India, aliado del CNI. El fin de la influencia del PCI puede ser crucial con vistas a las propuestas de reformas económicas en sectores como el de las pensiones o el bancario y abre la puerta a la entrada de capital privado en algunas empresas públicas. "Estos reveses son una oportunidad para que los comunistas se reinventen como partido comunista y no como partido bisagra", afirmó por su parte el profesor universitario afín al PCI, Krishna Ananth.

Por otra parte, el partido Bharatiya Janata seguirá siendo el principal de la oposición al CNI, aunque algo debilitado. "Los resultados dan al Gobierno mucha más libertad de acción que la que podía esperar", afirmó el presidente del Centro para Investigación Política. "No sólo no necesitará el apoyo de los comunistas, sino que incluso la oposición, el BJP, está tan menguado tras estas elecciones que el CNI tendrá también capacidad de maniobra en política exterior", indicó.

CACHEMIRA

La principal prioridad en el exterior será, de nuevo, Pakistán, país al que Nueva Delhi acusa de complicidad en los atentados del pasado noviembre en Bombay en los que murieron al menos 173 personas. Clave será también el desarrollo de los acontecimientos en la Cachemira india, cuya independencia o anexión reclama Islamabad.

A pesar de las últimas revueltas antiindias, los resultados de las elecciones en Cachemira han sido favorables al Gobierno central. Esta ocasión ha sido la primera en las últimas dos décadas de conflicto en la que concurre un candidato separatista, Sajjad Gani Lone, pero finalmente no ha logrado el acta de diputado. Lone rompió con la tradicional negativa de los independentistas a participar en las elecciones para entrar en las instituciones indias y abogaba por luchar por la "libertad"de Cachemira en Nueva Delhi.

Este candidato defendía un cambio en la estrategia del separatismo a raíz de la alta participación —60 por ciento— en las elecciones estatales del pasado año a pesar del boicot de los secesionistas. Esta participación fortaleció la postura del Gobierno central, a pesar de que muchos analistas defendieron que se trataba de un voto por una mejora del gobierno a nivel regional y no de una legitimación del dominio indio sobre Cachemira oriental. "Competir en las elecciones es un cambio de estrategia, no de ideología", sostiene Lone, quien encabezó algunas de las grandes manifestaciones independentistas del pasado año.

El CNI y la Conferencia Nacional, ambos partidos de la coalición gubernamental, podrían hacerse con cinco de los seis escaños en disputa por Jammu-Cachemira, nombre oficial de la parte de Cachemira controlada por India.