Estados Unidos

El embajador estadounidense dice que Zapatero nunca le pidió un encuentro con Bush

El embajador de EEUU en España, Eduardo Aguirre, Confesó hoy que el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, "nunca"le pidió que organizara un encuentro con George W. Bush.

Sin embargo, declaró Aguirre en Telemadrid, el presidente de EEUU le "pidió que arreglara las relaciones con España"porque "tenían que mejorar"ya que "es un país importante". Aunque matizó que tampoco le pidió un encuentro con Rodríguez Zapatero.

Eduardo Aguirre, que dejará su puesto el próximo mes de enero, señaló que Barack Obama "ha capturado la imaginación de los jóvenes y las mujeres". El nuevo presidente electo es "un agente de cambio, un tsunami, ha creado nuevas expectativas de cambio e ilusión", añadió.

Sobre si España podrá acudir a la próxima Cumbre del G-20 para afrontar la crisis financiera, Aguirre explicó que "no creo que se puedan conectar temas como el de la bandera con todo lo demás".

En este sentido, recordó que "el G-20 es un grupo que existía antes de la crisis, y sus participantes, que son los que representan los intereses económicos del mundo, no sólo fueron elegidos por el presidente de Estados Unidos, sino por los líderes de Europa".

"España no era miembro ayer y no lo es hoy. Y estoy seguro de que la fórmula que se utilizó para elegir estos miembros no tuvo que ver con me cae bien fulano o mengano. Que España tenga interés es indiscutible, no sólo por la potencia que es, sino también por la relevancia financiera de los bancos españoles. Pero que yo sepa el cocido madrileño todavía no está en la mesa. Se está cociendo", apostilló.

Por último, el embajador resaltó que "entre España y Estados Unidos hay buenas relaciones. Las relaciones entre dos países las guía el mandatario pero se basan en los intereses importantes de los países, que van más allá de la personas sentadas en la Moncloa o en la Casa Blanca. Estamos todavía muy ligados en la lucha contra el terrorismo, el narcotráfico, la OTAN, el comercio, la cultura o la educación. Ningún presidente puede borrar esos intereses", concluyó.