Expectativas con Obama

Quedan pocos días para que Obama y su equipo pongan en marcha su programa de Gobierno. Su programa electoral en materia sanitaria ha generado expectativas sin precedentes. La Sanidad fue una de las estrellas de la intensa campaña, fue una prioridad en el discurso de los partidos. ¿Va a seguir siendo la estrella? ¿Qué impacto va a tener la crisis en las posibles reformas? ¿Cobertura universal? En un país donde más de 45 millones de personas no tienen o tienen una muy deficiente y parcial cobertura sanitaria, ¿cobertura de niños y adolescentes? ¿Mayor regulación? Hacer frente a estos retos tiene un coste, y no precisamente pequeño. ¡Ojalá la crisis no haga mella y no relegue de la agenda política la reforma sanitaria! Pero no sólo dinero es lo que necesita la sanidad americana. Lo más importante es un cambio de modelo para que los americanos puedan tener una cobertura universal, y, de otro lado, el análisis de algunos factores que han introducido ineficiencia en su modelo actual, como por ejemplo, los elevados costes de transacción o, para decirlo más claro, la burocracia le está saliendo muy cara al modelo sanitario de ese país. Pero no nos tenemos que quedar parados, porque nuestro sistema, que tiene la universalidad como buena seña de identidad, presenta ineficiencias que tendremos que abordar. Por eso tendremos que estar atentos para aprender de los cambios de Obama.