Fin de la impunidad

Hace unos meses Naciones Unidas en una importante conferencia sobre racismo pedía a los Estados que aplicaran sus resoluciones y condenaran a las organizaciones neonazis. A su vez la Unión Europea aprobaba una declaración marco en esa dirección; sin embargo España, pese a tenerlo recogido en su Código Penal, no había mostrado ninguna sentencia condenatoria por asociación ilícita al neonazismo. La sentencia pone fin a una situación de impunidad que han disfrutado hasta la fecha grupos de este tenor en nuestro país. Esto quiso decir el legislador en el Código Penal para la defensa de los derechos y libertades fundamentales de las personas. En nuestra democracia el derecho de asociación es muy amplio pero limita con la discriminación, el odio y la violencia. La sentencia es una esperanza para personas que son víctimas de la intolerancia extrema por tener un color de piel oscura, acento extranjero, una orientación sexual diferente, por sus ideas democráticas, por su religión o por cualquier motivo como sucede con los periodistas agredidos. Con esta condena por «asociación ilícita» comienza a hacerse justicia con las víctimas del odio y la sociedad democrática defiende su futuro.*Presidente del Movimiento contra la intolerancia