Gastronomía

Gastronomía a ritmo de música

El capuchino de frutos rojos es el postre de este musical menú
El capuchino de frutos rojos es el postre de este musical menúlarazon

Un plato, un tempo. En esto se basa el nuevo menú degustación del restaurante Conde Lucanor del hotel Convento Las Claras, en Peñafiel, que se inicia con un vermut y acompaña cada plato con cada uno de los cinco movimientos fundamentales de una pieza musical: lento, adaggio, andante, allegro y vivace. Una selección de su destacada gastronomía que se une al tempo musical para acompañar su exquisita degustación.

Este particular concierto gastronómico se inicia con el vermut «On my way», creado con gelatina de vermouth rojo con cítricos y olivas, para continuar después con cinco movimientos musicales de menor a mayor velocidad, que acompañan los diferentes platos de este menú degustación.

El tempo lento está representado en un primer plato de ravioli de amanita casera con crema suave de parmesano, trufa y crujiente de albahaca. Un movimiento más vivo es el adagio, como la famosa pieza de Albinoni, expresado con una receta de vieira con puré cremoso de coliflor, piruleta de langostino marinado y crujiente de papadoms.

Este menú, que cuesta 45 euros con IVA incluido, continúa con la velocidad más moderada del tempo como el Andante Spianato Opus 22 de Chopin, que expresa las lascas de bacalao confitado a baja temperatura con tapenade y mostaza verde. Más deprisa, más rápido, más animado es el allegro, como los creados por Mozart, que caracteriza la carrillera de buey con gnoquis de patata a la esencia de Pinares. Y para terminar esta selección gastronómica, el fin de esta sintonía, nada mejor que un dulce representado por un movimiento Vivace como el capuchino de frutos rojos sonoros.