Ilegal pero con licencia

Una imagen vale más que mil palabras. Se trata del conducto del hueco interior de una chimenea, cuyo diámetro es de apenas doce centímetros. Cuando el perito judicial contratado por una de las vecinas afectadas observó esta imagen no pudo por menos que decir que era imposible que alguien hubiese realizado un informe favorable del estado de los conductos. Y es que la normativa vigente establece que este tipo de chimeneas deben ser resistentes a los humos, al calor y a las posibles corrosiones ácidas que se pudieran formar. En referencia al material, estipula que deben ser refractarios, de hormigón resistente a los ácidos o de acero inoxidable, por lo que, según certifica el perito judicial, el material cerámico existente en sus viviendas no es adecuado para la extracción de humos y gases de combustión. Las chimeneas tampoco disponen del aislamiento térmico necesario para evacuar humos calientes. Tras analizar el estado de las viviendas de varios vecinos, el perito judicial concluyó que la cocina del bar «La esquina de Alcalá» debía ser retirada.