Johnny Hallyday a golpe de rock

Corría el año 1957 cuando un adolescente Johnny Hallyday vio a Elvis Presley en una película y decidió que él también quería hacer del rock¿n¿roll su forma de vida. Y dicho y hecho: en 1959 se presentó en sociedad y en 1960 ya tenía su primer disco, «Hello Johnny». Medio siglo después, «Le coeur d¿un homme» (Warner) hace su álbum número 48 -sin contar numerosos directos-, para cumplir una vieja aspiración: «Desde hace tiempo quería hacer un disco de blues, y por fin lo he logrado; rock¿n¿roll y blues siempre han ido de la mano, forman parte de mis orígenes. Pero también tenía claro que el objetivo no era hacer un álbum con un sonido del blues de los años 40, sino más actual; no diría comercial, pero sí accesible para todos, porque la gente tiende a pensar que es música que suena vieja, y realmente es todo lo contrario», explica el veterano cantante francés, toda una celebridad en su país. En España, José María Sanz, Loquillo, se convirtió en su gran embajador, reivindicando a Hallyday entre los grandes del rock. Una admiración que ha quedado sellada en este trabajo con el mano a mano que ambos protagonizan en «Cerbatana» (versión en castellano del clásico «Sarbatane», de Francis Cabrel), del mismo modo que el autor de «Halleluyah» o «C¿est la vie» ponía su voz en un tema del reciente «Balmoral» del cantante del Clot barcelonés. «Es un gran tipo, fue un verdadero placer trabajar con él, aunque mi pronunciación del castellano no es muy buena, pero queríamos hacerlo así, porque es una lengua muy válida para el rock», comenta Hallyday, nacido en 1943 como Jean Philippe Smet. No acaban aquí los cameos, porque a lo largo de «Le coeur d¿un homme» aparecen también nombres como el veterano bluesman Taj Mahal o Doyl Bramhall, guitarrista habitual de Eric Clapton, aunque la mayor sorpresa viene con «I am the blues», un tema escrito por Bono, quien también se encuentra en la extensa nómina de amigos de este francés de 65 años que desde hace tiempo vive en Los Angeles. «Cuando le comenté que estaba trabajando en un disco de blues, me dijo que me escribiría una canción, y así fue. Es un blues distinto, no tan de raíz, sino más urbano, como si hubiese salido directamente de una gran ciudad como Nueva York». Y más colaboraciones. En el reciente «Ça ne finira jamais» (sin edición en España), canta «Unchained melody» a dúo con Joss Stone. A sus 65 años, forma parte del reducido grupo que ha decidido dar larga vida al rock¿n¿roll, embarcándose en una nueva gira, que arrancó el viernes en París y que supondrá, además, su retirada de los grandes escenarios. «Cumpliré 66 dentro de poco, y creo que ha llegado el momento de estar con mi familia y disfrutar de otras cosas. Al principio la idea era despedirme este mes de julio, pero al final he decidido hacer varios conciertos más hasta fin de año».