Jueces y Policía eluden la culpa por liberar al agresor de Moreno

El Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM) considera que los policías encargados de vigilar a Astrit Bushi, considerado principal líder de la banda que agredió brutalmente al productor José Luis Moreno y asaltó su chalé, han podido incurrir en un delito de infidelidad en la custodia de presos. A la vez, descarta cualquier responsabilidad disciplinaria por esos hechos tanto del juez de Alcobendas que le tomó declaración y decretó su libertad provisional por otro robo en un chalé de La Moraleja. Así lo anunció el presidente del TSJ de Madrid, Francisco Javier Vieira, a través de una declaración institucional, en la que se daba cuenta del archivo de las diligencias informativas incoadas a raíz del suceso y se puso en conocimiento del Consejo General del Poder Judicial y del Juzgado de Instrucción de Alcobendas, «con el fin de que incoe, si lo considera oportuno, la causa penal por si los hechos descritos constituyeran un delito de infidelidad en la custodia de presos». Bushi declaró en el juzgado núero 3 de Alcobendas el 31 de marzo sobre una causa distinta a la relativa a la agresión de José Luis Moreno, en la que la Fiscalía solicitó la libertad provisional. Esa decisión se le comunicó en presencia de su abogada y de los policías que le custodiaban y regresó a los calabozos del juzgado. «Se desconocen los datos por los que no regresó a prisión», señaló el presidente del TSJ de Madrid. El auto, añade el tribunal, se remitió a la prisión de Madrid III, donde se acordara su puesta en libertad si no tuviera otras causas. Otro excarcelado por error La Confederación Española de Policía (CEP) trasladó la responsabilidad de lo ocurrido a la Guardia Civil ya que, según su versión, los agentes que custodiaban al preso ni sabían que era muy peligroso ni habían sido informados por la Guarcia Civil de que debía regresar a un centro penitenciario tras comparecer ante el juez. El sindicato añadió que los agentes del Instituto Armado «no llegaron a cumplimentar lo que se conoce como diligencia de recepción y entrega de presos», un documento que acredita que un recluso pasa a estar bajo la custodia de otro cuerpo policial. El secretario de Organización, Lorenzo Nebreda, añadió que la normativa prevé que la unidad policial que se hace cargo del preso es la responsable del mismo hasta su retorno a la cárcel y la cadena de custodia sólo se altera mediante la entrega documentada del preso. Así que los agentes, que carecían de información, según la CEP, decidieron cumplir el auto del juez. No obstante, ayer se supo que un segundo miembro de la banda acusado de asaltar el chalé de Moreno fue excarcelado por error el 18 de marzo, aunque fue detenido pocos días después.