París

Kouchner dice que no hay ninguna «sombra» en las relaciones franco-españolas

El ministro francés de Asuntos Exteriores, Bernard Kouchner, aseguró hoy que no hay ninguna «sombra» en las relaciones entre Francia y España a causa del polémico comentario del presidente francés, Nicolas Sarkozy, sobre el jefe del Gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero. «Puedo garantizar que era una broma del presidente, una forma de mofarse de sus interlocutores como lo hace a menudo», explicó en una entrevista a la emisora «France Info» Kouchner, en alusión a las palabras de Sarkozy sobre Rodríguez Zapatero el pasado martes ante un grupo de parlamentarios franceses. El ministro francés indicó que la pasada noche había hablado con su homólogo español, Miguel Ángel Moratinos, y que «hay un muy buen entendimiento, una verdadera camaradería. Hay poca gente con la que nos entendamos mejor que con los españoles. Desde hace dos años hemos estado siempre en las mismas posiciones, Zapatero, Moratinos, el presidente Sarkozy y yo mismo». Kouchner añadió que no hay ninguna «sombra» en las relaciones entre España y Francia, tras indicar que él mismo estará esta noche en Córdoba y que en dos semanas se celebrará en Madrid la cumbre franco-española. Sobre la reacción de la ex candidata socialista a las presidenciales de 2007, Ségolène Royal, que ha pedido «excusas» a Rodríguez Zapatero en nombre de Francia por los comentarios de Sarkozy, el responsable diplomático francés comentó que «la política merece algo mejor» por parte de la dirigente opositora. No obstante, descartó la idea de que Royal pida perdón por haber pedido perdón, ya que también «la política internacional merece algo mejor». El periódico «Libération», que fue el que reveló las palabras de Sarkozy, se reafirmó hoy en el contenido de las declaraciones del jefe del Estado sobre Rodríguez Zapatero -que han sido desmentidas por el Elíseo-, aunque puso el acento en que el presidente francés en absoluto estaba insultando al jefe del Gobierno español, sino todo lo contrario. «Libération», que utiliza como fuente a varios diputados presentes en el almuerzo del martes pasado en el Elíseo, contó que a un comentario de un diputado socialista que dijo que «se pueden decir muchas cosas de Zapatero», Sarkozy le replicó con ironía para ridiculizar a los socialistas franceses. «Tal vez no es muy inteligente. Yo conozco a otros que eran muy inteligentes y que no llegaron a la segunda vuelta de las elecciones», dijo el presidente francés en alusión al ex primer ministro socialista Lionel Jospin, que en 2002 quedó apeado de las Presidenciales en la primera vuelta al obtener menos votos que Jacques Chirac e incluso que el líder ultraderechista Jean-Marie Le Pen.