Los Ángeles

La comedia que reconquistó Francia

La comedia que reconquistó Francia
La comedia que reconquistó Francialarazon

Imagínese que a un urbanita confeso le envían a trabajar a un pueblo en la otra punta del país en el que sus vecinos hablan en un dialecto incompresible y donde además tienen fama de insociables. El mundo se le viene encima, el apocalipsis... Con esta desdicha se topa Phillipe, director de una oficina de correos francesa, y los espectadores de «Bienvenidos al Norte». Pero, para sorpresa del cartero venido a más, pronto su nuevo destino le obligará a tirar por la borda todo ese equipaje de prejuicios que se llevó de la Provenza. La convivencia con sus estrenados compañeros en Pas de Calais, una región fronteriza a Bélgica, la hará redescubrir la felicidad. Es más, comprobará que en la relación con su mujer, atrapada en una depresión, mejora con la distancia.
Retrato de familia
Esta trama alejada de artificios y aderezada con grandes dosis de humor patrio ha convertido a «Bienvenidos al Norte» en la película francesa más taquillera de la historia –más de 20 millones de espectadores–, récord que ostentaba hasta la fecha «La gran juerga», estrenada en 1966, y sólo superada por el ahogamiento de Di Caprio en «Titanic». ¿La fórmula del éxito? Detrás del guión, de la dirección y de un secundario clave en la historia, se encuentra Dany Boon, uno de los cómicos más mediáticos del país, que no ha hecho otra cosa que esbozar en forma de largometraje la tierra que le vio nacer y pintar «un retrato de mi gente, de mi infancia, de mi familia», como el propio Boon reconoció ayer a LA RAZÓN.
No en vano, en sus inicios como comediante interpretaba en sus espectáculos a un personaje similar al que ahora da vida en «Bienvenidos al Norte». Por eso, no es de extrañar que durante dos años se enclaustrara para actualizar sus recuerdos y dar forma al grueso del guión antes de compartirlo con los productores, que sabían del tirón de Boon, pero que no acababan verlo claro. «Es una comedia ligeramente caricaturesca, pero muy realista, que acaba con estereotipos que yo escuchaba de pequeño como el creer que en el norte de Francia se muere más joven que en Burdeos sólo porque hay menos luz solar», asegura Boon.
Tal es el huracán generado por «Bienvenido al Norte» que Lille y sus alrededores se han convertido en lugar de peregrinaje de muchos franceses, que, cuando tiraban millas con su coche hacia esa dirección, no pasaban más allá de Eurodisney. Tampoco hay fronteras para Boon, que aterrizaba en Madrid procedente de Los Ángeles donde supervisa el «remake» que producirá Will Smith y protagonizará Steve Carrel. Boon asegura estar confiado en que la nueva versión va a ser fiel: «También va a trabajar el conflicto territorial con un norteamericano sureño que se traslada a vivir a la frontera con Canadá». Pero si de algo está orgulloso Boon es de haber dado la vuelta a otro cliché, esta vez cinematográfico. «Antes cuando alguien pensaba en rodar un drama, miraba al Norte y dejaban las comedias para el Sur. Eso también ha cambiado», certifica.