La inacción de los políticos

A pesar de la ignorancia arrogante de una serie de científicos jubilados, o que sólo dominan una pequeña parte del problema climático, y de periodistas que sólo conocen lo que leen y oyen y que no quieren leer ni oír más que lo que desean escuchar, el cambio climático es una realidad espeluznante si no se le pone freno. Para España, el cambio climático supone un endurecimiento insoportable de las condiciones de vida: La subida del nivel del mar, más pronto que tarde, supondrá la inundación de las ciudades de la costa, Cádiz, Huelva, Valencia, la ruina de los cimientos de los apartamentos de la costa, la llegada del mar a Sevilla. España sufrirá etapas muy largas de sequía, de varios meses, intercalados por inundaciones violentas, como en este año de 2007. Las condiciones de vida se harán imposibles al sur del Sáhara, con la emigración masiva de hasta 200 millones de personas. Podemos poner freno a este cambio climático y no sólo no nos cuesta dinero, sino que si se hacen bien los cálculos, ese freno genera riqueza a manos llenas, y riqueza para todos. Tenemos la tecnología necesaria en nuestras manos para capturar toda la energía solar que necesitemos. Solo con 5.000 km² de superficie española, esencialmente en desiertos y ciudades, una superficie que es el 1% de la de España, podemos capturar toda la energía que necesitamos. Pero los políticos no se deciden. Todo son vacilaciones, dudas, mucho hablar y nada actuar. Perder el tiempo, perder una oportunidad dorada para entrar en otro mundo, en otra etapa de la historia humana. Creeremos a los políticos cuando dejemos de ver 4x4 por las calles y veamos que todos los edificios nuevos en España tienen sus fachadas cubiertas al 100% de placas solares. ¿Actuarán alguna vez nuestros políticos?

*Catedrático de la Universidad de Alcalá