Bolivia

La ONU pide el inmediato regreso de Zelaya y condena el golpe en Honduras

La ONU pide el inmediato regreso de Zelaya y condena el golpe en Honduras
La ONU pide el inmediato regreso de Zelaya y condena el golpe en Honduraslarazon

La Asamblea General de la ONU aprobó hoy por aclamación una resolución en la que pide la "inmediata e incondicional"restitución de Manuel Zelaya como presidente "legítimo y constitucional"de Honduras. "Esta resolución expresa la indignación del pueblo de Honduras y del resto de la comunidad internacional", dijo el depuesto presidente de Honduras, al dirigirse a la Asamblea poco después de la aprobación unánime de esa resolución. La resolución condena "el golpe de estado"ocurrido en Honduras "que ha interrumpido el orden constitucional y democrático, así como el ejercicio legítimo del poder", que el domingo sacó de la presidencia a Zelaya. Los 192 países de la ONU estuvieron también de acuerdo en pedir "la inmediata e incondicional restitución del gobierno legítimo y constitucional del presidente de Honduras, José Manuel Zelaya Rosales, y de la autoridad legalmente establecida"en el país centroamericano "para que cumpla el mandato para el que fue elegido por el pueblo". Asimismo instan a "todos los países a que no reconozcan otro gobierno que no sea el constitucional"de Zelaya, además de expresar su firme apoyo a los esfuerzos hechos de acuerdo al capítulo VIII de la carta de Naciones Unidas, que insta a la resolución pacífica de los conflictos. La resolución fue presentada por Antigua y Barbuda, Bolivia, Cuba, República Dominicana, Ecuador, El Salvador, Guatemala, Honduras, Nicaragua y Venezuela. Zelaya se vio forzado al exilio el pasado domingo después de que el Ejército lo sacara de su casa por la fuerza y lo trasladara a Costa Rica, tras mantener un grave enfrentamiento durante varios días con otros poderes del Estado. Zelaya insistía en llevar a cabo una consulta popular con vistas a una reforma constitucional que, según sus detractores, le abriría el camino a la reelección, pese a que el Parlamento y el Tribunal Supremo la habían declarado ilegal.