Barcelona

La oposición carga contra Maragall por los malos resultados de Primaria

Una cuarta parte de los alumnos de 2.083 centros no tiene el nivel suficiente para pasar a estudiar Secundaria.

La oposición carga contra Maragall por los malos resultados de Primaria
La oposición carga contra Maragall por los malos resultados de Primarialarazon

Lo adelantó el miércoles el portavoz de CiU en el Parlament, Oriol Pujol, y lo confirmó ayer el conseller de Educació, Ernest Maragall. Una cuarta parte de los alumnos de sexto de Primaria –el 24,2 por ciento– no tiene el nivel suficiente para pasar a Secundaria. Este pésimo resultado supone una carga más para el departamento educativo, que además de lidiar con las quejas suscritas por los docentes, ahora debe sumar los ataques de la oposición política.
Tanto CiU como PP criticaron a la conselleria y al Govern por su política educativa. El diputado del PP, Rafael López, consideró que «el nivel educativo en Cataluña es muy bajo y perjudica gravemente al competencia de los alumnos respecto a otros comunidades». «Lo podrían contestar alumnos de cuarto de Primaria, era muy fácil», criticó el diputado. De hecho, el examen, que supuso un gasto de un millón de euros, utilizó textos en los que se preguntaba por el menú inicial del dvd de Harry Potter, un cuento infantil y un relato de vikingos.
Desde CiU, la diputada Irene Rigau acusó al Govern de no saber «mejorar» el sistema educativo, por lo que reclamó «un debate ordenado» sobre el futuro del sistema y «abandonar el «actual funcionamiento del Govern basado en la improvisación y la corrección de medidas anunciadas precipitadamente».
Los datos no engañan y la peor parte se la lleva el castellano. El 27,4 por ciento de los 64.388 alumnos que realizaron la prueba el pasado 6 de mayo no superaron la prueba de esta lengua y el 24,2 por ciento no aprueba ni el catalán ni las matemáticas.
La conselleria, que quería curarse en salud frente a los catastróficos datos de otros informes, como el Pisa o el de la Fundación Bofill, no ha conseguido superar sus expectativas.
 «Estas cifras no son aceptables como país», defendió el conseller, aunque optó por escudarse alegando que los resultados no le «sorprenden» porque están en la línea de otros indicadores que ya se conocían.