El extraño caso de los espías israelíes en Líbano

Las tropas españolas en Líbano realizan su misión, mantener la paz, con normalidad y sin muchos altercados, con la memoria puesta siempre, eso sí, en los seis paracaidistas que fueron vilmente asesinados en junio de 2007, y con la guardia puesta en el hecho de que están en uno de los lugares potencialmente más peligrosos del mundo. Ayer, esta placidez extrañamente sobrevenida estuvo a punto de trocar en una polémica diplomática y de espionaje surrealista y sin precedentes.
A primera hora de la mañana, la ministra de Defensa, Carme Chacón, contactaba con las misiones en el exterior a través de videoconferencia, como hace cada mes. Su conexión «en abierto» de ayer (el resto de la charla la lleva a cabo sin medios de comunicación presentes) correspondía con la misión en Líbano. El general José María Prieto, al otro lado de la pantalla, daba novedades. Además de la normalidad con la que se han desarrollado las elecciones en el país del Cedro del domingo, de las que la ministra destacó la «deportividad» con que los partidos habían asumido el resultado, el general hizo la declaración del día: «Durante la semana, destacar que se ha continuado con estas labores que se están haciendo de búsqueda de la célula de espionaje israelita (en Líbano). Ha habido varias detenciones».
De esta frase, todos los presentes deducen automáticamente que las tropas españolas han participado en esa operación y que fruto de la misma se han producido arrestos de espías israelíes. Sin embargo, un par de horas después, el ministerio se apresuró a aclarar esa información y asegurar que todo era un malentendido porque los militares españoles nunca habían participado en esa misión. Para reforzar la corrección, la ministra aclaró en el Congreso que nuestro contingente no ha tomado parte en la búsqueda de esa célula de espías israelíes, tras lo cual pidió disculpas a los informadores que la preguntaban por «la confusión», informa Ep. El propio general envió por la tarde una nota en la que aseguraba que «el comentario era relativo a las actuaciones de las Fuerzas Armadas y de Seguridad Libanesas. En ningún momento ni las fuerzas de Unifil, ni las españolas han participado en nada relacionado con este asunto. Siento que mis palabras hayan podido ser entendidas de otra manera».
La portavoz de Defensa del PP en el Congreso, Beatriz Rodríguez-Salmones, no se dio por satisfecha inicialmente y declaró a Servimedia que este asunto es «motivo suficiente para pedir una comparecencia» de la ministra si no se dan las explicaciones pertinentes, ya que consideraba que «no vale con un desmentido».
Un par de horas después, una vez conocida la nota del general Prieto, indicaba a Europa Press que «apreciamos la aclaración. Entendemos que, efectivamente, el relato de unos hechos ha podido transmitir laconfusión de que había una participación en los hechos que se estaban relatando. Creemos que ha quedado suficientemente aclarado». Además, señaló finalmente que «la palabra disculpas era inédita en esta ministra. Las disculpas son bienvenidas».