París

Livni dice que Israel no puede aceptar la tregua que propuso Francia porque legitimaría a Hamás

La ministra de Asuntos Exteriores israelí, Tzipi Livni, explicó hoy en París al presidente y al ministro de Asuntos Exteriores de Francia, Nicolas Sarkozy y Bernard Kouchner, respectivamente, que Tel Aviv no puede aceptar la tregua de 48 horas en la Franja de Gaza que propuso París por motivos humanitarios porque legitimaría «la agenda de odio» de Hamás, que gobierna ‘de facto' en ese territorio palestino.
«La agenda de odio de Hamás no puede ser legitimada por la comunidad internacional», subrayó Livni en rueda de prensa al término de la reunión con los dirigentes galos, en la que se trató de encontrar una solución diplomática a la actual crisis, que comenzó cuando el Ejército israelí comenzó a bombardear Gaza el sábado pasado en respuesta a los ataques con cohetes de los milicianos palestinos.
La ministra de Exteriores israelí explicó que Israel se está esforzando por fortalecer al Gobierno de Al Fatá —que gobierna Cisjordania liderado por el presidente Mahmud Abbas— mientras trata de debilitar a Hamás en la Franja. «Estamos trabajando en una estrategia dual con el fin de alcanzar un acuerdo de paz mientras nos ocupamos de Hamás (...). Estamos trabajando para ayudar a los moderados mientras atacamos a los extremistas como Hamás», reiteró. Por su parte, Kouchner condenó a Hamás por disparar cohetes contra territorio israelí y añadió que la propuesta francesa de alto el fuego se hizo en vista de la difícil situación humanitaria que atraviesa la Franja, a lo que Livni contestó que tal «crisis humanitaria» no existe y dijo que Israel está facilitando a los gazacíes el 70 por ciento de la electricidad que usan y que ha permitido la entrada en Gaza de 300 camiones con ayuda humanitaria.
Sin embargo, el Comité Internacional de la Cruz Roja ha advertido de que la situación humanitaria en la Franja de Gaza sigue siendo «extremadamente preocupante», especialmente por lo que respecta a la situación sanitaria. Además, la organización Save the Children llamó la atención sobre la situación especialmente grave de los niños, que «están sufriendo los efectos físicos y psicológicos de la violencia» y sufren el riesgo de «padecer malnutrición debido a la escasez de alimentos», más acusada desde el inicio de los enfrentamientos.