Londres

Los fondos movilizados disparan el déficit francés

La Razón
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Francia resiste mejor que algunos de sus principales socios –entre ellos, España– los embates de la crisis. Sin embargo, su ingreso en el club de los países en recesión es, ahora ya, cuestión de semanas. Para este año se prevé un crecimiento negativo superior al 1% pese a que en 2008 ha podido escapar de sus garras gracias, en buena parte, al consumo interno. De hecho, ha entrado más tarde que otros en la crisis. Un argumento que Nicolas Sarkozy agita cada vez que puede para denotar así los sólidos cimientos del sistema galo frente a las turbulencias. También espera que salga de ella entre los primeros. Pero de momento la amplia panoplia de ayudas desgranadas por el Gobierno no ha surtido efectos notables. Todavía es pronto, aunque se hacen cada vez más apremiantes a la vista de unos indicadores económicos desbocados: el paro, que cerró 2008 con una tasa del 7,7 % tras destruir 89.000 puestos de trabajo en el último trimestre, podría brincar al 9,8 % este año –en el que se prevé la pérdida de 214.000 empleos– e incluso rebasar el 10% en 2010; el déficit público se disparará al 4,5% mientras sectores claves como la construcción y la automoción, que emplea a un 10% de la población activa, registrarán abultadas pérdidas. Para mitigar la sangría, los dos principales fabricantes, Renault y PSA-Citroën han obtenido del Estado 3.000 millones, cada uno, en forma de préstamo a interés reducido a cambio de no deslocalizar ni proceder a nuevos despidos. El arma de choque de Sarkozy se eleva globalmente a unos 440.000 millones destinados fundamentalmente a reflotar el sistema bancario y reactivar la economía. Para facilitar la refinanciación de las entidades que lo necesiten el Estado garantizará los préstamos interbancarios por un valor total de 320.000 millones que se suman al fondo de 40.000 millones al que los bancos pueden recurrir para recapitalizarse. Así, el Ejecutivo galo ha inyectado por el momento 21.000 millones de liquidez para los fondos propios de las seis principales entidades financieras galas.