Mañana se presentan otros 2257 aspirantes

«Estaba chupado», «creo que el examen era bastante flojo», «no sé qué clase de criba se piensan que van a hacer con esto»... Estas fueron sólo algunas de las impresiones de los que el pasado 14 de marzo entregaron muy convencidos sus test para poder convertirse en controladores de acceso.
Una semana más tarde, lo fácil lo parecía menos, seguramente, porque lo que no sabían los aspirantes a porteros de discoteca es que una de las partes del examen tenía truco. Quizá por eso, casi el 40 por ciento de los que se presentaron, suspendieron.
La prueba constaba de cincuenta preguntas de conocimientos cuyo temario giraba en torno a la Constitución o la Ley de Espectáculos. Esa parte del test, se dio bien y sólo el 10 por ciento de los aspirantes no la superó.
El test psicotécnico fue otro cantar. En esta parte, lo que parecían preguntas absurdas como ¿qué prefieres ir a un concierto de música clásica o tirarte de un puente colgado de una cinta elástica? evaluaban aspectos más personales como la agresividad, el consumo de drogas, o la estabilidad emocional.
Además, de nada valía mentir en una pregunta porque se supone que se podía «cazar» a los embusteros en otra de las preguntas del examen. Por eso, quizá, en esta parte cayeron el 90 por ciento de los que no aprobaron el examen, casi mil de los 2.500 que se presentaron.
Mañana, todos aquellos aspirantes que no superaron la prueba, y quienes se hayan decidido por probar suerte esta vez, volverán a enfrentarse al examen. La cita, a pesar de las peticiones de los aspirantes que no querían que fuese en fin de semana por la mañana, será a las 11 en las facultades de Farmacia y Medicina de la Complutense.