Más VPO caen en el limbo financiero

«Ya hemos tocado fondo». Con esta sentencia resumía el presidente de Gaesco y portavoz de la Mesa de la Construcción de Sevilla, Miguel Rus, el estado de la construcción en la ciudad y en toda la provincia. Las administraciones públicas vienen defendiendo la vivienda protegida como la solución para frenar el cataclismo económico y laboral, pero las VPO sufren cada vez más la desconfianza generalizada de las entidades bancarias y ahorradoras, que insisten en mantener cerrado a cal y canto el grifo de la financiación. Tras un encuentro con las asociaciones y colectivos profesionales integrados en la Mesa de la Construcción, el propio consejero de Vivienda y Ordenación del Territorio, Juan Espadas, confirmó ayer la persistencia de las «dificultades en la concesión de créditos», tanto para la construcción como para la adquisición de viviendas, también protegidas.Las cifras empeoranSegún los datos de la Junta de Andalucía, el 70 por ciento de las promociones de VPO calificadas en 2007 obtuvo financiación y otro 22 por ciento se quedó sin respuesta ese año. En 2008 las cifras empeoran: sólo el 53 por ciento de las 4.179 viviendas protegidas aprobadas consiguieron un crédito, mientras los promotores de otro 33 por ciento siguen todavía a la espera del visto bueno a su financiación. Esta «incertidumbre», según explicó Juan Espadas, dificulta enormemente la actividad de las empresas y «agrava su situación».Como solución, decididamente apoyada por la Mesa de la Construcción, el consejero avanzó que se encargará a la Empresa Pública del Suelo de Andalucía (EPSA) la realización de «un análisis específico y pormenorizado» de cada promoción autorizada de VPO, para despejar cualquier duda sobre su viabilidad y garantizar después el «respaldo» económico de la Junta de Andalucía, a modo de «aval» ante las entidades bancarias y ahorradoras.Espadas insistió en que el objetivo es «concentrar» los esfuerzos «en proyectos viables en municipios con demanda y promotores que nos ofrezcan garantías». Según aseguró, «en unos días» estará concluido por las consejerías de Vivienda, Economía y Hacienda el nuevo «plan de apoyo financiero» para que el anunciado «aval» público se materialice en cantidades concretas.Por su parte, el presidente de la patronal sevillana de la construcción certificó la urgencia de que los empresarios «ajustemos al máximo» los proyectos residenciales y su diseño a la demanda real de VPO, respecto a su localización, a su tipología y a las necesidades de los potenciales compradores. Miguel Rus certificó que en Sevilla capital esa demanda existe, calculando unos 35.000 solicitantes de VPO para el casco urbano y el área metropolitana. Ayudar a los compradoresEn relación a este colectivo, el consejero reiteró también la necesidad de incentivar la concesión de préstamos para la adquisición de viviendas mediante el «apoyo directo» de la Administración andaluza, fomentando el alquiler con opción a compra.Sobre la propuesta del sector para reducir las dimensiones de las VPO y «adaptarlas al mercado», Rus y Espadas consideran imprescindible encontrar fórmulas «más rápidas» que la modificación del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU), pero no pudieron concretar medida alguna.