San José
Micheletti llega a Costa Rica para dialogar con Zelaya
- Ambos claman ser el presidente "legítimo"de Honduras por lo que el entendimiento resultará difícil.- El presidente costarricense, Oscar Arias, actuará de mediador.
El presidente interino de Honduras, Roberto Micheletti, llegó hoy a San José a la espera de que en la reunión con el mandatario depuesto, Manuel Zelaya, se pueda obtener una solución que esté "en el marco de la Constitución". "Vamos a trabajar incansablemente para encontrar una solución enel marco de la Constitución", dijo Micheletti a su llegada a San osé, tras ser recibido por el ministro de Exteriores de Costa Rica, Bruno Stagno. En unas breves declaraciones a la prensa, el mandatario interinoagradeció al presidente de Costa Rica, Oscar Arias, por servir demediador en la crisis política que vive Honduras desde el pasado 28 de junio, cuando Zelaya fue derrocado por un golpe de Estado. El viceministro de la Presidencia costarricense, José Torres,informó al diario local 'La Nación' que el encuentro está previstoque comience a las 11.00 horas (19.00 hora española) en la residencia de Arias, ubicada en el sector de Rohrmoser (oeste de San José). Micheletti confesó que espera regresar a Tegucigalpa como "elpresidente constitucional de Honduras". El ministro de Defensahondureño, Adolfo Sevilla, había informado que se espera que retornehoy mismo, aunque algunos miembros de su delegación --compuesta por 22 personas-- podrían pasar unos días más en San José. Más que una mesa de diálogo, la reunión de este jueves parece el escenario de un duelo. Y muchos se preguntan cómo Arias logrará una flexibilización de las posiciones. El tono de los enemigos tampoco ha sido muy alentador. Zelaya calificó a Micheletti como "un gorila"y un "traidor"y el gobernante interino lo tachó de delincuente. "El cometió delitos, tiene que pagar", dijo Micheletti. Así las cosas, las piezas del rompecabezas apuntan a la creación de mecanismos intermedios en que los dos lados sientan que han conseguido algunas garantías. Y la propuesta de adelantar las elecciones presidenciales previstas para finales de noviembre es una de las salidas que suena fuerte en Tegucigalpa. El misterio, sin embargo, es qué ocurrirá en el período que va desde ahora hasta esos presuntos comicios adelantados. Fuentes diplomáticas consultadas por BBC Mundo han señalado que la única presión efectiva sobre el gobierno de Micheletti para que ceda en su postura sería una combinación entre sanciones económicas y masivas manifestaciones a favor de Zelaya. El aeropuerto de Toncontín había retomado sus actividades normales este miércoles, tras haber permanecido varios días cerrado. Partidarios de Zelaya realizaron una marcha por el centro de la capital hondureña, mientras que los detractores se manifestaron en Choluteca, ciudad cercana a la frontera con Nicaragua. Por segundo día consecutivo la esposa del mandatario derrocado, Xiomara Castro, protestó en las calles de Tegucigalpa exigiendo el regreso de su marido. Sin embargo, con el inicio del diálogo en San José, la tensión ha bajado y el país tiene puestos los ojos en la construcción de un consenso político que permita poner fin a la crisis. "Yo tengo fe en las negociaciones y confío en la capacidad del señor Arias. En el nombre de Dios espero que todo salga bien", dijo Erika Almendares, una joven trabajadora, madre y estudiante que está preocupada por el futuro de su país. Por lo pronto el toque de queda se ha reducido y ahora sólo está vigente entre las once de la noche y las cinco de la mañana. La secretaria de Estrado de EE.UU., Hillary Clinton, dijo que está "muy preocupada"por la crisis hondureña y destacó que su país se ha implicado a fondo en buscar una salida. "Tanto mi equipo como yo hemos trabajado muy duro estos días para alcanzar un proceso de mediación", señaló Clinton. Por su parte el nuevo encargado de la política estadounidense para América Latina, Arturo Valenzuela, criticó el golpe de Estado y consideró que aunque había graves problemas en Honduras, "la solución no era que los militares expulsaran a Zelaya y lo enviaran fuera del país". Por su parte, el portavoz del Departamento de Estado, Ian Kelly, se mostró optimista respecto a las conversaciones de San José. "Ahora tenemos un diálogo en marcha que abre una posibilidad real de resolver esto", señaló. Mientras avanza la vía diplomática, muchos hondureños están preocupados por la situación económica. Venezuela suspendió los envíos de petróleo a Honduras y organismos internacionales han cancelado los programas de crédito para el país como un mecanismo de presión para que se restituya el orden institucional. "Nosotros no podemos transferir el beneficio de Petrocaribe a una dictadura", dijo el ministro de Energía de Venezuela, Rafael Ramírez, refiriéndose a los precios preferenciales con que Caracas le vendía el crudo al gobierno de Zelaya. Pese a las presiones, empresarios y economistas consultados por BBC Mundo han dicho que el país puede sobrevivir por unos tres a cuatro meses con un bloqueo crediticio y comprando petróleo a precios normales. El problema es que nadie sabe si esto es sólo el comienzo de una serie de sanciones que podría aplicar la comunidad internacional si el gobierno de Micheletti decide hacer caso omiso de los avisos y advertencias de los organismos multilaterales.
✕
Accede a tu cuenta para comentar