Irán

Prioridades desafíos y debilidades del nuevo Gabinete

La Razón
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-¿Por qué un «mega» Gobierno de unidad nacional?–La atomización del voto en Israel –ninguno de los grandes partidos obtuvo el 25% de las papeletas el 10-F–, obliga a los políticos a establecer alianzas imposibles. Netanyahu quedó segundo en los comicios, pero ha conseguido aunar una mayoría parlamentaria. El coste: 30 ministros y seis viceministros. - ¿Qué implica? –Tanto el tamaño como la heterogeneidad del nuevo Gabinete son elementos potenciales de fricción. Tampoco puede considerarse positivo que un gran porcentaje de los ministros sean a su vez miembros del Parlamento. La división entre el poder Ejecutivo y el Legislativo se ve dañada. En tercer lugar está la posición de Livni que ha optado por no entrar en el Gobierno y ejercer de alternativa real. - ¿Está fundado el temor hacia Lieberman? –Entre 2006-2008, Avigdor Lieberman ocupó la cartera de Asuntos Estratégicos con Ehud Olmert sin que se resintieran las relaciones con EE UU o la UE. Asimismo, el líder de Yisrael Beiteinu acepta la solución de los dos estados, si bien, introduce un principio étnico que será una fuente de tensión. En su programa, defiende dos estados étnicamente homogéneos y propone la cesión de territorios israelíes con mayoría árabe a Palestina. - ¿Cuáles serán sus prioridades? –En política exterior Irán, que Netanyahu considera una amenaza existencial, y en política interior, la crisis económica. Respecto al conflicto árabe-israelí no hay una postura clara. «Bibi» no se ha pronunciado para no irritar, quizás, a los miembros de su partido y de la coalición que no aprueban los dos estados. Ahora bien, sí ha expresado su deseo de avanzar en la paz.- ¿Cómo serán las relaciones España-Israel? –Presumiblemente buenas. El ministro Moratinos tiene una relación fluida con Netanyahu, pero el proceso de la Audiencia Nacional puede enturbiarlas.