Illescas

Secuestradores del joven chino liberado en Toledo eran amigos de la familia

 Algunos de los 16 ciudadanos chinos detenidos en relación con el secuestro de un joven también chino de 18 años liberado esta semana en Illescas (Toledo) eran amigos de la familia, por lo que conocían de primera mano los pasos que iban dando los padres y si estaban en contacto con la Policía.
Los secuestradores, que golpeaban a su víctima constantemente y le mantenían "a pan y agua", pidieron a la familia 300.000 euros por liberar a su único hijo y les presionaron con imágenes del joven con los ojos vendados y confesando el maltrato.
Según ha informado el Cuerpo Nacional de Policía, de los 16 detenidos en la operación, doce han pasado esta mañana a disposición judicial y otros cuatro han quedado en libertad con cargos.
Los arrestados están relacionados con otro secuestro ocurrido el pasado octubre.
En aquella ocasión, la víctima fue un menor de corta edad que también fue liberado con éxito y se logró detener a parte de la banda de secuestradores.
La investigación ha sido extremadamente difícil ya que ninguno de los implicados habla español -lo que ha obstaculizado la interpretación de los mensajes que enviaban a la familia- y por el empleo de medios sofisticados para las comunicaciones, tanto entre los propios secuestradores como entre éstos y la familia.
Los agentes ha encontrado numerosos teléfonos móviles en poder del "ejecutor"del secuestro con imágenes en las que se aprecia el mal estado físico del joven, con los ojos vendados, y la actitud amenazante de uno de los guardianes que empuñando una pistola le apunta a la cabeza y le golpea con el arma.
La Policía ha agradecido el comportamiento de la propia familia y de la comunidad china en general, que han colaborado en todo momento, facilitando todos los datos que eran solicitados por parte de los investigadores.