Energía

Eduardo González: «Todas las fuentes son necesarias»

Eduardo González: «Todas las fuentes son necesarias»
Eduardo González: «Todas las fuentes son necesarias»larazon

«España es un país sin recursos energéticos. Eso condiciona nuestra economía y nos lleva a un déficit exterior de energía del orden del 5 por ciento del PIB, lo que supone una rémora para la economía en su conjunto. Con la caída del precio del petróleo la situación es, en estos momentos, distinta de manera coyuntural pero, si hay una actividad económica razonable, y esperemos que la haya, habría un nuevo repunte de esos precios que volverían a llevarnos a una senda de costes elevados.

Nuestro modelo de consumo energético pasa por dos ámbitos, el de la electricidad y el del transporte. En el primero, tenemos un modelo de producción muy centralizado que lleva a necesitar combustibles tradicionales. Habría que acometer quizás una descentralización. El problema está en el equilibrio costes e impacto ambiental, la sabiduría estaría en el equilibrio entre los dos.

Si miramos las energías renovables, vemos que la eólica es casi competitiva hoy en día en un mercado abierto; la fotovoltaica necesita una mejora muy importante –la regulación ha sido bastante desastrosa, hemos financiado el desarrollo tecnológico exterior y hemos importado muchísimo material fotovoltaico sin un beneficio claro para la economía española–; en termosolar, hay que tener cuidado de que no pase lo mismo, y en cuanto a la valorización energética de los residuos, lo cierto es que en España se hace muy poco respecto a lo que se hace en Europa.

La nuclear es la otra gran pata de futuro. Es, dentro de los sistemas tradicionales, la que no emite CO2, la que tiene unos costes estables de generación y da estabilidad al sistema eléctrico.También hay que tenerla en cuenta en el mix básico que no emite CO2. Seguramente es muy difícil alcanzar los objetivos de la UE, el famoso 20-20-20, viente de ahorro, veinte de disminución de CO2 y veinte de renovables, sin apoyarse en la nuclear. La regulación del sistema eléctrico nos ha llevado a un déficit que en estos momentos está en torno a los 15.000 millones de euros, que es casi dos tercios de la factura eléctrica.

El otro gran tema es el transporte, que en nuestra sociedad se basa en el petróleo y en la medida en que genera CO2, y existe una problemática en torno a su suministro: hay que conseguir evolucionar. Es un hecho cultural muy ligado a nuestra civilización; por lo tanto, no se puede romper de manera drástica, pero hay que trabajar seriamente en una ruptura tecnológica, lo que seguramente vendrá ligado al vehículo eléctrico y también al de hidrógeno. Tenemos que ir hacia una economía de transición en el campo del transporte para poder llegar a estas tecnologías.

En resumen, hay que potenciar la transición al modelo nuevo; todas las fuentes son necesarias, pero tenemos que poner el énfasis en aquellas que nos pueden ayudar a resolver el problema del CO2 y a mantener unos niveles de costes razonables; necesitaremos una cierta estabilidad regulatoria; apoyo a I+D; y un esfuerzo de España por integrarse en los modelos europeos y mundiales para estar dentro de la solución que entre todos encontremos a estos problemas».

PERFIL l ex presidente del Foro de la Industria Nuclear Española y de Foratom l director general de las centrales nucleares de Almaraz y Trillo desde 1999 hasta 2002 l vicepresidente del Consejo de Seguridad Nuclear entre 1985 y 1995