Un lento declive desde las generales

Madrid- Basta echar un vistazo a las encuestas efectuadas por NC Report para LA RAZÓN desde octubre del pasado año para darse cuenta de que el PSOE ha ido perdiendo fuelle, con distintos altibajos, desde las elecciones del 9 de marzo de 2008. Sólo siete meses después de las generales, el partido de José Luis Rodríguez Zapatero ya había caído en las preferencias de los votantes del 44,4% de apoyos del 9-M a un 41,2 por ciento. Desde entonces, sólo un ligero repunte en febrero de este año, cuando alcanzó el 41,7 por ciento. Fue sólo un espejismo, pues dos meses después la encuesta de abril le otorgaba un 39,1 por ciento de los sufragios, que ahora se sitúa en un 40,2 por ciento y que se traduce en 1.187.335 apoyos menos para las filas socialistas.El PP, a la inversaEl PP, sin embargo, sólo ha necesitado pasar del 40,4 por ciento que obtuvo en las generales del pasado año al 42,1% de los votos que le otorga la última encuesta para dar la vuelta a la tortilla, pues los 10.558.000 votos que obtendría ahora serían botín suficiente para aumentar su representación en, al menos, ocho diputados, pasando de los 154 de hace dieciséis meses a un máximo de 163. O lo que es lo mismo: el partido de Mariano Rajoy pasaría de estar quince diputados por debajo del PSOE a superar a la formación de José Luis Rodríguez Zapatero hasta en siete escaños.Los descontentos por la gestión del presidente del Gobierno también han crecido considerablemente. Si en octubre del pasado año un 45,4 por ciento se mostraba disconforme con la misma, ese porcentaje se sitúa en la última encuesta en un 55%, diez puntos por encima. En cuanto a Rajoy, un 56,6% rechaza su gestión frente al 50,1% que lo hacía en octubre del pasado año.En lo que no hay cambios significativos es en el grado de conocimiento que tienen los encuestados de los líderes políticos. Un 99,2% afirma conocer a Zapatero (idéntico porcentaje que en octubre pasado) y en cuanto a Rajoy, un 99% responde afirmativamente (98,6% entonces).