Ciencia

Y hoy sí he comido

La Razón
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La emergencia de nuevos desórdenes alimentarios (a bulimia y anorexia se han sumado en poco tiempo ortorexia, vigorexia, trastorno por atracón y diabulimia) permite imaginar situaciones tan atípicas y surrealistas como la de un individuo que se presenta ante una asamblea terapéutica diciendo: «Me llamo fulano y hoy sí he comido». Se trataría de una reunión de drunkorexicos o ebriorexicos anónimos y expresaría la voluntad de rehabilitación de un individuo que, durante algún tiempo, dejó de comer durante horas para compensar las calorías ingeridas por el consumo inmoderado de bebidas alcohólicas. La ebriorexia o drunkorexia es el resultado de un encuentro entre dos convencionalismos sociales: la necesidad de estar delgado para recibir la aprobación del grupo y la gran aceptación social del consumo de alcohol a grandes dosis. A veces se abusa de los términos, véase manorexia como anorexia nerviosa varonil, pero parece evidente que algo serio nos está pasando en la región del cerebro que regula el apetito.