Alemania

La primera víctima del pacto de Turingia: Kramp-Karrenbauer renuncia a suceder a Merkel

La actual ministra de Defensa tira la toalla como presidenta de la CDU y anuncia que no será candidata a canciller

Annegret Kramp-Karrenbauer después de la rueda de prensa en Berlín.
Annegret Kramp-Karrenbauer después de la rueda de prensa en Berlín.Markus SchreiberAgencia AP

La crisi de Turingia va más allá del Land. El terremoto político en Alemania se ha cobrado hoy su primera víctima. La presidenta de la Unión Cristiano Demócrata (CDU), Annegret Kramp-Karrenbauer, ha renunciado a suceder a Angela Merkel como canciller. La actual ministra de Defensa alemana no participará en la carrera por la presidencia, según ha anunciado este lunes un portavoz del partido conservador alemán.

La decisión de Kramp-Karrenbauer -conocida popularmente como KKK- está estrechamente ligada a la crisis generada la semana pasada por la elección de un primer ministro liberal en el estado federado de Turingia con los votos del partido conservador y los de la formación de ultraderecha Alternativa por Alemania (AfD). Veinticuatro horas después de su elección, el primer ministro liberal tuvo que dimitir por la oleada de críticas. La crisis de Turingia y el cordón sanitario a los ultras de AfD se trasladó a la Gran Coalición. Este fin de semana convocaron una reunión para marcar posiciones. El Gobierno alemán se ratificó en su aislamiento a las fuerzas extremistas.

La líder de la Unión Cristianodemócrata (CDU), Annegret Kramp-Karrenbauer, quien sucedió a la canciller, Angela Merkel, al frente del partido en diciembre de 2018, anunció hoy que no se postulará a la Cancillería y su intención de renunciar a la presidencia de los conservadores.

Según avanzaron los medios, Kramp-Karrenbauer explicó hoy en una reunión de la cúpula del partido que tiene previsto iniciar antes del verano el proceso dentro de la formación en la carrera hacia la Cancillería, preparar al partido para el futuro y después renunciar a la presidencia de la formación.

Subrayó que la presidencia del partido y la candidatura en la carrera hacia la Cancillería deben estar en manos de la misma persona.

Según medios locales, AKK señaló hoy durante la reunión de la cúpula de su partido que “existe una relación no resuelta de partes de la CDU con la AfD y la Izquierda”, al tiempo que subrayó estar “estrictamente en contra” de cualquier tipo de cooperación con estos dos partidos.

Las reacciones de los dos partidos aludidos no se han hecho esperar, en particular la de los ultraderechistas, que ven con buenos ojos la anunciada renuncia de Kramp-Karrenbauer.

AKK "no ha podido imponer la política que practica dentro de su formación de aislamiento de nuestro partido democrático y ciudadano, y eso es bueno", declaró el presidente honorario de AfD, Alexander Gauland.

Agregó que es "totalmente irracional y lejano a la realidad no querer cooperar a largo plazo con la AfD", algo que las bases de la CDU "han entendido hace tiempo", al tiempo que culpó a AKK de abocar al caos a la su partido "con su rumbo aislacionista".

En tanto, La Izquierda, aglutinadora de poscomunistas y disidentes de los socialdemócratas, advirtió con la anunciada renuncia de AKK de un giro a la derecha de la CDU.

“El mérito de AKK es que mantuvo la frontera de la Unión hacia la derecha y así el espíritu de la Unión”, declaró la presidenta de La Izquierda, Katja Kipping, quien pronosticó que la lucha por la sucesión de Kramp-Karrenbauer será “una discusión sobre la orientación” del partido, según informa Efe.

Si asume el cargo Friedrich Merz, quien en diciembre de 2018 perdió frente a AKK (esta obtuvo el 51,8 % de los votos en el partido frente al 48,2 % de aquél) en la lucha por la sucesión de Merkel, "entonces la CDU se aliará pronto con la AfD", advirtió.

Por otra parte, Kramp-Karrenbauer, que además de presidir el partido es ministra de Defensa, señaló que tiene intención de permanecer en este cargo siempre y cuando cuente con el apoyo de su formación y del grupo parlamentario.

Según fuentes próximas al partido, Merkel apoyó explícitamente el deseo de Kramp-Karrenbauer de mantener la cartera y le expresó su agradecimiento. Por lo tanto, KKK permanecerá como ministra de Defensa hasta el final de mandato en 2021.