Hallado el cadáver de una diputada mexicana en una fosa clandestina

Llevaba más de un mes desaparecida y la encontraron muerta en una fosa. Anel Bueno tenía 38 años y era diputada local en el Estado de Colima por Morena, el partido del presidente Andrés Manuel López Obrador, quien confirmó el hallazgo de la joven legisladora, este martes, e informó de que hay un detenido.

A Bueno la secuestró un grupo de hombres armados el 29 de abril en el municipio de Ixtlahuacán, Colima, cerca de la costa pacífico, mientras promovía medidas sanitarias en medio de la pandemia de Covid-19.

“Quiero aprovechar desde ahora para expresar mis condolencias a los familiares de la legisladora de Colima que fue secuestrada y el día de ayer se encontró su cuerpo en una fosa clandestina…Fue algo muy lamentable”, dijo López Obrador en rueda de prensa en Campeche, un Estado del sureste mexicano por donde está realizando una gira tras varios meses confinado.

La Fiscalía de Colima aún no ha aportado más detalles sobre el caso pero López Obrador confirmó que hay una persona arrestada. “La investigación sobre el asesinato de la legisladora está a cargo de la Fiscalía del estado y ellos son los que están informando y hay participación del Gobierno federal, pero todavía no sabemos sobre las causas. Lo único es que hay un detenido y que ya hay una declaración culpando a los responsables”, añadió el presidente.

El secuestro se conoció el pasado 14 de mayo por la madre de la víctima, que dijo haber guardado silencio durante dos semanas por recomendación de la Fiscalía General de la República, pero pasado ese tiempo sin recibir ningún resultado decidió hacerlo público.

“Nos mata la ineficiencia de la investigación que se está realizando, porque hasta ahora no se ha podido dar un resultado concreto que conduzca a la localización de mi hija", dijo la mujer en aquel momento, poniendo el foco sobre la Fiscalía, que, según denunció la mujer, no emitió una Alerta Alba por la desaparición de la legisladora a pesar de haberlo solicitado. Este mecanismo tiene el objetivo de coordinar de inmediato a los tres órdenes de Gobierno cuando se produce la desaparición de una mujer.

Colima, una pequeña entidad entre Jalisco y Michoacán, vive una profunda crisis de violencia desde 2016, cuando se alzó al primer puesto nacional en tasa de homicidios. Una posición que no ha abandonado en los últimos cuatro años. En 2019 registró 760 asesinatos, 85,4 por cada 100.000 habitantes. Además de 146 cadáveres encontrados en fosas clandestinas, que se registran en un conteo diferente. El presente año la violencia sigue un curso similar y esta misma semana aparecieron siete policías muertos, también en una fosa, que habían desaparecido días antes. En lo que va de año México lleva registrados 314 feminicidios.