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Internacional

Tensión, protestas y sillas voladoras. El Gobierno italiano despliega al Ejército para controlar un rebrote en el sur de Italia

Máxima tensión en Mondragone. Los vecinos de un edificio confinado, declarado "zona roja" se niegan a permanecer en sus hogares, por lo que Italia envía a un centenar de militares para mantener el orden

coronavirus hotspot in the town of Mondragone, Italy
Un hombre tira una silla desde su balcón, en la "zona roja", donde se registraron 49 casos de coronavirus en Mondragone, al sur de ItaliaCIRO FUSCOEFE

El Ejército italiano aislará un edificio del municipio de Mondragone (sur) donde se han confirmado 49 casos de coronavirus, después de que sus habitantes, la mayoría inmigrantes búlgaros, hayan salido a la calle desoyendo a las autoridades.

El presidente de la región de Campania, Vincenzo De Luga, pidió al Gobierno de Italiael despliegue urgente de un centenar de agentes” para garantizar el control del foco y la ministra del Interior, Luciana Lamorgese, le confirmó el envío de un contingente del Ejército.

El brote se ha producido en un edificio en la localidad costera de Mondragone, cerca de Nápoles, donde viven 700 personas, y el lunes las autoridades lo declararon “zona roja”, decretando su aislamiento para contener la propagación del coronavirus.

La Policía italiana no es suficiente, de ahí que se haya pedido la intervención del Ejército
La Policía italiana no es suficiente, de ahí que se haya pedido la intervención del EjércitoCIRO FUSCOEFE

Los contagiados, todos asintomáticos, están siendo trasladados al hospital de Maddaloni dedicado a enfermos con la COVID-19 pero no se localiza a trece inmigrantes búlgaros que habían dado positivo, según informan los medios locales.

La mayoría de estas personas ni siquiera están censadas en la localidad y se cree que prefieren ocultarse de los registros para no dejar de trabajar, pues la mayoría son jornaleros de los campos, de acuerdo a las mismas fuentes.

Este jueves decenas de búlgaros abandonaron el edificio aislado para protestar, lo que derivó en momentos de tensión con los vecinos italianos, que les acusan de no cumplir el confinamiento y además de dedicarse a negocios ilegales como el contrabando de tabaco.

Residentes del edificio declarado "zona roja" en Mondragone
Residentes del edificio declarado "zona roja" en MondragoneCIRO FUSCOEFE

El alcalde de Mondragone, Virgilio Pacifico, exigió al Gobierno de Giuseppe Conte y al regional que actúen ante estos actos de “insubordinación” por parte de “ciudadanos extranjeros e italianos”, ya que cree que los efectivos policiales desplegados en el lugar son pocos.

Los últimos datos de la pandemia en Italia se sitúan en mínimos desde el comienzo de la crisis, el 21 de febrero, pero en el país se han contagiado 239.410 personas, la mayoría en el norte, y de estas 34.644 enfermos perdieron la vida, según Protección Civil.

Aunque los contagios estén mucho más contenidos que en los peores momentos de la emergencia, aún hay activos varios focos en el país, como este de Mondragone, uno de los más importantes por el número de infecciones.

Otro se sitúa en Porto Empedocre, en Sicilia, donde 28 inmigrantes rescatados en los últimos días en el Mediterráneo central por el barco de la ONG Sea Watch han resultado positivos.

También han emergido focos, controlados, en Roma, en concreto en el hospital San Raffaele Pisana, con 122 casos, o en un convento con cuatro monjas infectadas.

Otros brotes se encuentran en un barrio de la localidad de Palmi, en Calabria (sur); en una empresa de Bolonia (norte) con catorce positivos, o en Bolzano, Prato o Pistoia (norte)