Donald Trump

Trump pierde apoyos entre los veteranos de guerra para su reelección

El voto de los militares fue determinante en su victoria contra Hillary Clinton en 2016

Paratroopers with the 82nd Airborne Division practice aircraft jumping at Fort Bragg
Paracaidas de la base Fort Bragg, en Carolina del Norte, antes de partir hacia Colombia para ejercicios conjuntos con el Ejercito colombianoJONATHAN DRAKEReuters

En el país del mundo con más veteranos de guerra, cerca de 23 millones, las acusaciones de comentarios ofensivos del presidente Donald Trump hacia soldados estadounidenses caídos en combate podrían pasarle factura el próximo 3 de noviembre en las elecciones presidenciales.

La prestigiosa revista The Atlantic daba a conocer, a través del testimonio de cuatro distintas fuentes bajo condición de anonimato, los despectivos comentarios realizados por Trump en referencia a militares de Estados Unidos muertos en el campo de batalla.

“Perdedores” y “pringados” son algunos de los calificativos que replicó de boca del propio Trump la demoledora acusación de la revista estadounidense, al hacer referencia a soldados capturados por los enemigos o muertos en combate. Al parecer, el mandatario hizo esos comentarios al cancelar la visita oficial a un cementerio de Francia en 2018, con soldados estadounidenses que murieron en la Segunda Guerra Mundial, para no estropearse su peinado por la lluvia.

El presidente Trump aseguró que esa información era falsa.

"Arroja NOTICIAS FALSAS Y ODIO», tuiteó Trump, pero el redactor en jefe de The Atlantic, Jeffrey Goldberg, le respondió: «No vamos a dejarnos intimidar por el presidente de Estados Unidos. Vamos a hacer nuestro trabajo».

A pesar de los esfuerzos de la Casa Blanca por negar tajantemente esas acusaciones, fueron muchos los que las tomaron por ciertas a raíz de otras polémicas sobre el tema protagonizadas por Trump en el pasado.

Por todos conocida, por ejemplo, su peor que mala relación con el fallecido ex senador de Arizona, John McCain, de quien el presidente dijo que “no fue un héroe de guerra” por haber sido capturado en combate, a pesar de haber luchado en el campo de batalla por EE UU.

Los despectivos comentarios de Trump contra McCain quedaron registrados tanto en sus tuits como en entrevistas grabadas, al que tildó públicamente de “perdedor” por haber sido capturado en la Guerra de Vietnam. Tampoco se presentó a su capilla ardiente en el Capitolio, por expreso deseo de la familia, y se resistió a honrarle con banderas a media asta tras su muerte.

Otra de las acusaciones contra el presidente de EE UU a la que apuntan las fuentes de la publicación es la afirmación de que en desfiles nacionales de militares, Trump pidió expresamente que no se incluyera a heridos de guerra o amputados porque “nadie quiere ver eso”.

Este nuevo frente abre nuevas amenazas para su campaña, ya que algunas de esas declaraciones le han originado el distanciamiento de militares. Muy consciente de ello, ha intentado reforzar su mensaje electoral para recuperar ese apoyo clave en las urnas, pero las encuestas no le confirman que esas diferencias se hayan resuelto. Los pronósticos de la fidelidad militar hacia el actual presidente son peores ahora que hace cuatro años.

Trump ganó una mayor proporción del voto en las primarias de 2016 sobre el resto de sus contrincantes republicanos, entre miembros militares activos y ex militares. Ya en la contienda electoral, el candidato republicano a la presidencia de EE UU se llevó hace cuatro años la mayoría del voto militar entre veteranos y miembros en activo por un margen de 27 puntos sobre la candidata demócrata, según datos del Estudio Cooperativo de Elecciones del Congreso (CCES) de votantes verificados.

Pero ahora una buena parte de ese apoyo podría pasar a manos de su rival demócrata, Joe Biden. Así lo pone de manifiesto la última encuesta publicada por Military Times, realizada a más de 1.000 militares estadounidenses en activo con cerca de 30 preguntas para conocer su opinión acerca del clima político actual, las medidas implementadas por la Administración Trump y la Seguridad Nacional de EE UU.

Si nos fijamos en los estados indecisos, conocidos como “swing States” o “estados bisagra”, Trump ganó en 2016 en Arizona, Carolina del Norte, Florida, Michigan, Pensilvania y Wisconsin por menos de 4 puntos en cada uno. Si no hubiera ganado en apenas uno sólo de esos estados, habría perdido las elecciones.

Es decir, Trump no sería presidente de EE UU si no fuera por el apoyo de militar. Sólo en Florida, el republicano habría sido derrotado por algo menos de 5 puntos sin los votos de los militares. De hecho, ganó en ese estado por apenas 1 punto. Y las encuestas siguen posicionando a ambos candidatos, Trump y Biden, a la par en estos momentos.

Por tanto, el voto militar le resulta clave a Trump para garantizar de nuevo su victoria en las presidenciales. Razón principal por la que las filtraciones sobre su verdadera opinión en privado le han hecho tanto daño y podrían causarle graves consecuencias.

Dos motivos fundamentales han ayudado a que el apoyo hacia Trump haya sido fuerte entre los miembros militares. Por un lado, el destacado aumento del presupuesto de defensa en los últimos años y, por otro, las promesas electorales de retirar tropas en las zonas de conflicto.

Aunque, según destaca Military Times del sondeo realizado por la Asociación del Instituto para Veteranos y Familias Militares (IVMF, en inglés) junto con la Universidad de Syracuse, ese apoyo de los soldados en servicio activo ha visto una caída constante desde su elección hace cuatro años.

Con apenas un margen de error del 2% en el sondeo, sorprende que casi la mitad de los encuestados, un 49,9%, tienen una opinión desfavorable hacia el presidente estadounidense, en comparación con alrededor del 38 por ciento para los que es favorable.

Del total de 1.018 de los encuestados, el 42% desaprueba “fuertemente” la gestión de Trump en el poder. A pesar de estos datos, su popularidad sigue estando mejor posicionada que la de su predecesor, Barack Obama, aunque todavía por debajo del demócrata Joe Biden.

Y es que el 41% de los militares en activo sondeados asegura que votaría por Biden, frente al 37 por ciento restante que se lo daría al presidente, que aspira a su reelección, si las elecciones fueran hoy.

Resultados alarmantes para Trump, teniendo en cuenta que cerca del 40 por ciento de las tropas encuestadas se identifican como republicanos, mientras apenas el 16% dicen ser demócratas y un 44% independientes o de otro partido.

  • 41% de los militares en activo sondeados por Military Times votaría por Biden, frente al 37 % que lo haría por el presidente.
  • 40% de los soldados de EE UU se identifican como republicanos.
  • El 16% dice ser demócratas y un 44% independientes o de otro partido