Coronavirus

Francia saldrá del confinamiento el 15 de diciembre, pero con toque de queda

Macron anuncia la reapertura de los comercios este sábado. Bares, restaurantes y discotecas permanecerán cerrados hasta el 20 de enero

El presidente francés, Emmanuel Macron
El presidente francés, Emmanuel MacronPOOLREUTERS

La olla de presión estaba a punto de estallar. El presidente Emmanuel Macron anunció este martes la tan esperada flexibilización del confinamiento que llega como una válvula de escape para calmar los ánimos franceses.

Los más felices con este anuncio presidencial son, sin duda, los comerciantes. Después de un mes de cierre obligatorio y pérdidas millonarias, los llamados comercios no esenciales como tiendas, librerías, joyerías, zapaterías y todo el que no sea de alimenticion, finalmente podrán abrir sus puertas este sábado 28 de noviembre, justo para recibir la avalancha de clientes para sus compras de navidad.

Sin embargo, el confinamiento no será levantado en las primeras dos semanas. El teletrabajo deberá continuar, las constancias de desplazamiento seguirán siendo obligatorias y los controles policiales también.

La segunda etapa llegará el 15 de diciembre, cuando los franceses podrán salir de sus casas sin justificación y sin miedo a una multa por desacato que hoy está fijada en 135 euros. Sin embargo, la libertad no será total. El confinamiento se suavizará, pero dará paso a un toque de queda desde las nueve de la noche hasta las siete de la mañana. El 24 y el 31 de diciembre la circulación será libre.

Buenas noticias también para las salas de espectáculos, cines, teatros y museos que vuelven a abrir a partir del 15 de diciembre, siempre siguiendo las medidas sanitarias respectivas.

Por otra parte, los que definitivamente no tendrán una Navidad feliz serán los bares, restaurantes y discotecas. A pesar de la presión que han ejercido durante meses para poder trabajar, Macron ha anunciado este martes que no podrán abrir sus puertasal menos hasta el 20 de enero de 2021.

Una decisión que traerá malestar económico y reacciones judiciales como la del Sindicato de Oficios de Industrias Hoteleras de Francia, que ya ha introducido un recurso contra el decreto de cierre del 29 de octubre de 2020 y que –se suponía- tenía una duración de solo un mes. Perder el período de Navidad y Año Nuevo, lleno de celebraciones, comidas y reuniones, podría representar el cierre definitivo para muchos restaurantes y bares. Sin mencionar que el aire de vida nocturna y tertulia típicos de París, Lyon o Marsella seguirá apagado dos meses más.

Como bálsamo a esta situación, el presidente anunció una medida económica nada despreciable: el Estado otorgará una ayuda de hasta 10.000 euros mensuales para todos los restaurantes y hoteles que se han visto obligados a cerrar por la pandemia, o bien, otorgará un 20% de la cifra de negocios para aquellos establecimientos que consideren que los 10.000 euros son insuficientes para seguir en pie.

Todas estas medidas están sujetas a una condición que Macron repitió varias veces este martes por la noche: el número de contagios de covid-19 debe permanecer por debajo de 5.000 diarios. De lo contrario, un reconfinamiento podría volver a decretarse.

Con respecto al plan de vacunación para los próximos meses, Macron detalló que la vacuna anti covid estará disponible en Francia a finales del mes de diciembre, cuando una primera tanda se aplicará a la población más frágil y de mayor edad, a la espera de un segundo calendario de vacunación que iniciará en primavera del 2021. Como bien apuntó el mandatario francés: “El regreso a la normalidad no será de hoy para mañana”.