“Apocalipsis” de visones zombie en Dinamarca

Una situación “muy muy grave”. Con estas palabras, la primera ministra danesa, Mette Frederiksen, comunicó la decisión de sacrificar a 17 millones de visones por una mutación del coronavirus que podía propagarse a los humanos. El virus había pasado de los humanos a los pequeños y peludos animales, había mutado y había vuelto a dar el salto a los humanos. Para Frederiksen el virus mutado es un “riesgo para la eficacia” de las futuras vacunas que supuestamente comenzarán a utilizarse a primeros de año.

Este sacrificio masivo de visones ha provocado numerosos inconvenientes y situaciones desconocidas hasta el momento. Uno de los más llamativos es el fenómeno de los “visones zombies”. Para enterrar a los ejemplares sacrificados se cavaron tumbas poco profundas, se echaron los miles de pequeños cadáveres y se han ido tapando con arena.

Pero pocos días después de los enterramientos, se ha producido una escena que parece sacada de una película de terror apocalíptico, con miles de visones muertos por el suelo y otros emergiendo de la tierra como si hubieran vuelto del más allá para vengarse de sus verdugos, Todo ello rodeado de un olor nauseabundo.

Nada más lejos de la realidad. Detrás de todo hay una explicación. La aparición de miles de animales muertos repartidos por los caminos que llevan a estos cementerios se debe a que alguno de los camiones ha sufrido un percance y los animales se han caído del remolque.

Pero lo más curioso el es de los visones zombies. Los animales fueron enterrados en fosas comunes y tapados con arena, pero no demasiada. Esto ha provocado que, con el paso de los días, los gases que se producen en el proceso de descomposición, han ido hinchando a los animales, y han ido empujando hacia el exterior a los de la parte superior de la fosa. Esta acumulación de gases, ha provocado que algunos de los animales hayan llegado a explotar y que se haya visto cuerpos de visones emergiendo de los pozos.

Todo esto ha venido provocado también porque los sacrificios se han producido en un tiempo récord y ha habido que actuar con rapidez para enterrarlos a todos. Los agricultores tenían que matar a todos sus visones, a cambio de una cantidad por cada ejemplar. Además, recibirían una compensación extra si lo hacían en menos de 10 días, lo que ha hecho que todos hayan querido acabar con sus animales de forma rápida.

Además de la apocalipsis de visones zombies ha habido otros problemas. A principios de mes, miles de visones muertos quedaron esparcidos a lo largo de un tramo de 17 kilómetros de la carretera después de derramarse desde la parte trasera de un camión. También se encontraron más visones esparcidos por otra carretera y se acusó a un conductor de no asegurar su carga.

La policía de la región de West Jutland enterró a los animales de forma apresurada y, aunque insistió en que no existe riesgo de infección, se han visto obligados a volver a intervenir. Según explicaron, el problema ocurrió en algunas “tumbas” donde los visones fueron enterrados a un metro de profundidad, y donde ahora se está echando más tierra.

Thomas Kristensen, de la Policía Nacional, explicó que el suelo arenoso de la zona no es lo suficientemente pesado como para evitar que los cuerpos de los visones salgan a la superficie. “La descomposición de los cuerpos genera gases y hace que el visón se expanda un poco. De esa manera, Unos cuerpos empujan a otros y los hacen salir fuera del suelo.

Los vecinos de Los alrededores de estas zonas de tumbas fueron avisados sobre el fuerte olor que provocaría la descomposición de los cuerpos, aunque se les advirtió de que no eran peligrosos. A pesar de ello, las autoridades reconocieron que existía una posibilidad de contraer la Covid de un animal muerto, pero para ello se debe entrar en contacto directo con el cuerpo del animal. Esto se debe a que el virus queda alojado dentro del pelaje del animal muerto.

Como medida de protección, las tumbas han sido valladas y están sometidas a vigilancia para evitar más infecciones.

A pesar de la diligencia de los productores, han manifestado su contrariedad por la decisión de acabar con todos los visones y muchos de ellos han iniciado procesos judiciales porque, entre otras cosas, defienden que los políticos no tenían autoridad para ordenar la matanza.

Sin embargo, los dirigentes han calificado la medida de exitosa y defienden que gracias a ello probablemente haya sido erradicada la mutación porque no se han detectado nuevas infecciones desde el 15 de septiembre.

Los científicos creen que el virus mutante pasó de los trabajadores de las granjas de pieles al visón en el verano antes de que se transmitiera a los humanos. Al cruzar entre especies, se produjo una mutación en su proteína de ‘pico’, que utiliza para ingresar a las células humanas. Fue significativo porque las principales vacunas candidatas funcionan dirigiéndose a esta proteína.

Cuando se supo la noticia sobre la nueva cepa a principios de este mes, Gran Bretaña prohibió a los ciudadanos no británicos que regresaran de Dinamarca e introdujo reglas estrictas de cuarentena para cualquier británico que hubiera regresado recientemente del país.

En ese momento, el secretario de Salud del Reino Unido, Matt Hancock, advirtió que los mutantes podrían tener “graves consecuencias” si se generalizaban.

El Ministerio de Salud danés dijo hoy en un comunicado: “No ha habido nuevos casos de la mutación del visón Cluster 5 desde el 15 de septiembre, lo que ha llevado a la autoridad danesa de enfermedades infecciosas SSI a concluir que esta variante probablemente haya sido erradicada”.