La retirada de tropas estadounidenses en Oriente Medio aumenta el temor a ataques iraníes

Mientras el Pentágono tiene previsto retirar tropas de Oriente Medio en las próximas semanas, bajo las órdenes del presidente Donald Trump, los líderes militares estadounidenses están trabajando para encontrar otras formas de disuadir a Irán de posibles ataques y para contrarrestar los argumentos de que Estados Unidos está abandonando la región.

Un alto funcionario militar estadounidense con conocimiento de la región dijo el lunes que Irán podría intentar aprovechar las retiradas de tropas estadounidenses de Irak y Afganistán, y la salida planificada del portaaviones USS Nimitz del Golfo Pérsico. El funcionario considera que los líderes militares han determinado que, por la situación de seguridad en la región, los Nimitz deben permanecer allí ahora y “por algún tiempo en el futuro”. Además, el funcionario asegura que también se podría enviar un escuadrón de aviones de combate adicional a la región, si fuera necesario.

El Nimitz abandonó la región del Golfo y estaba listo para regresar a casa. Pero el barco recibió la orden de volver a la zona la semana pasada para brindar seguridad adicional mientras continúan las retiradas de tropas de Irak y Afganistán. Un funcionario de defensa estadounidense dijo en ese momento que la decisión garantizaría que las tropas estadounidenses puedan disuadir a cualquier adversario de tomar medidas contra las fuerzas estadounidenses. No se dio una fecha concreta, pero el oficial militar estadounidense que habló el lunes dejó claro que el cambio es indefinido en el tiempo.

La posible amenaza iraní se ha convertido en una preocupación cada vez mayor en las últimas semanastras el asesinato del científico nuclear iraní Mohsen Fakhrizadeh. Irán ha culpado de la muerte a Israel, que se sospecha en asesinatos anteriores de científicos nucleares iraníes. Los funcionarios estadounidenses también están preocupados por un posible ataque de represalia iraní en el primer aniversario del ataque aéreo estadounidense que mató al principal general de Irán, Qassim Soleimani, y a altos líderes de la milicia iraquí cerca del aeropuerto de Bagdad a principios de enero. El funcionario militar dijo que Estados Unidos está al tanto de la planificación y las amenazas de los ataques iraníes, y que algunos están muy madurados mientras otros son simples intenciones. Una preocupación clave, dijo, es que las milicias respaldadas por Irán en Irak pueden estar dispuestas a actuar incluso sin las bendiciones o la dirección de Teherán.

La presencia del Nimitz, dijo el funcionario, puede hacer que Irán o las milicias reconsideren un posible ataque. El Pentágono es consciente del impacto del despliegue ampliado en los marineros del Nimitz y en el plan de la Marina para el mantenimiento del barco, dijo el oficial militar.

El Pentágono anunció el mes pasado que Estados Unidos reducirá tropas en Irak y Afganistán a mediados de enero, afirmando que la decisión cumple con la promesa de Trump de traer fuerzas a casa de las largas guerras estadounidenses. Con la retirada acelerada, Estados Unidos reducirá el número de tropas en Afganistán de más de 4.500 a 2.500, y en Irak de aproximadamente 3.000 a 2.500. Sin embargo, posponer el regreso del Nimitz mantendrá entre 5.000 y 7.000 marineros e infantes de marina en Oriente Medio, probablemente hasta el próximo año.

Otros barcos del grupo de ataque Nimitz pueden permanecer con el portaaviones. El oficial militar dijo que el Pentágono buscará otras formas de compensar la pérdida del Nimitz cuando el portaaviones abandone la región. La decisión de retirar tropas de Trump se produjo a pesar de los argumentos de los altos funcionarios militares que prefieren una retirada más lenta para preservar los logros obtenidos.

El general de la marina Frank McKenzie, principal comandante de Estados Unidos para Oriente Medio, ha abogado durante mucho tiempo por una presencia constante de portaaviones en la región del Golfo para disuadir a Irán. Al visitar el portaaviones USS Harry S. Truman en febrero, McKenzie les dijo a los marineros: “Están aquí porque no queremos una guerra con Irán y nada hace más que un adversario potencial se piense dos veces una guerra que la presencia de un portaaviones y el grupo de ataque que lo acompaña “.

A pesar de las demandas generalizadas de buques de la Armada de los EE. UU. en otras partes del mundo, McKenzie solicitó y recibió una presencia naval mucho mayor de lo habitual en la región de Oriente Medio durante la primera parte de este año. Pero con el tiempo, las cifras han disminuido, en reconocimiento del esfuerzo del Pentágono por poner más énfasis en China y el Indo-Pacífico.